Pulseras. Uno de los aparatos que se presentará en la Feria sirve para fabricar pulseras de localización y con usos médicos como medir presión o frecuencia cardíaca.

La primera feria para la defensa

Durante dos días se concentrarán en Sangolquí casi 40 empresas nacionales y extranjeras para ofrecer sus productos. Habrá paracaidistas, parapente, canes amaestrados.

Conferencias, charlas técnicas, exposiciones, ponencias científicas, mesas de trabajo, exhibiciones, operaciones militares, armamento, industria.

Todo eso reunirá la Primera Feria de Desarrollo Tecnológico para la Defensa que se desarrollará en la Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE, en Sangolquí, entre el jueves 20 y el viernes 21 de junio. Se abrirá al público a las 09:00. Las puertas se cerrarán a las 18:00.

Es una iniciativa del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas cuya jefatura está a cargo del general Roque Moreira.

La preparación del acontecimiento tomó más de cuatro meses, señala el coordinador del evento el teniente coronel Roberth Vargas. El oficial señala que la actividad busca fortalecer el vínculo entre el sector empresarial y académico, con la parte operativa de Fuerzas Armadas.

Los tres espacios que se han dispuesto para desplegar los stands asignados a las 20 empresas internacionales y 19 nacionales que participarán suman casi 5.000 metros.

Se ocuparán los 2.500 metros del Campo de Marte o patio de ceremonias de la ESPE y otros dos en los parqueaderos por 2.400 metros.

Entre los objetivos de la Feria está fortalecer la vinculación entre el Estado, industria y academia, mediante el establecimiento de alianzas estratégicas, transferencia tecnológica y equipamiento de defensa, a fin de solventar las necesidades institucionales con mayor efectividad.

Los militares requieren vestido, calzado, alimentación, armamento y demás pertrechos que pudieran ser proveídos por la industria nacional. Al momento la mayor parte de implementos se compran afuera, señala Vargas.

Los organizadores creen que ese será el mejor escenario técnico militar y académico para intercambiar ideas y alternativas para el aprovechamiento de la innovación como herramienta básica para el desarrollo de las capacidades militares. El lema de la feria es ‘Soluciones ecuatorianas para los ecuatorianos’.

El evento es abierto a todo el público. Las instituciones participantes dirigirán sus esfuerzos en promover y exponer los mejores avances tecnológicos en áreas específicas de la seguridad y defensa como: mando y control, ciberdefensa, simulación, inteligencia artificial, sistemas de armas, entre otras. Es la apuesta de los organizadores.

La Feria coincide con los festejos por el aniversario número 97 de creación de la universidad militar. En un solo recinto se podrá encontrar demostraciones en telecomunicaciones, radares, drones y otras innovaciones.

Los proyectos del Centro de Investigación de Aplicaciones Militares (Cicte) formarán parte de la exposición. Sus responsables ultiman los detalles de las creaciones que mostrarán al público. Con 28 años de existencia el Centro de Investigación, dirigido por el mayor Manolo Paredes, ha impulsado proyectos como la creación de un software para la detección de personas implementado en vehículos no tripulados.

Se trata de un algoritmo para la vigilancia, detección y otras aplicaciones derivadas de la capacidad de visión del computador. Un algoritmo es una función que transforma los datos de un problema (entrada) en los datos de una solución (salida).

Ese algoritmo hace posible que el vehículo aéreo no tripulado (dron) detecte personas en tiempo real utilizando una cámara de bajo costo.

La aplicación puede ser usada por Fuerzas Armadas o la sociedad civil según sus necesidades, señala Wilbert Aguilar, un PhD experto en robótica. Aguilar explica que otro algoritmo puede ser instalado en un vehículo no tripulado (dron) y es capaz de seguir a un objetivo sin perderlo de vista y transmitir la información observada en tiempo real.

En la Feria se presentará un Packbot que sube escaleras. Mide 15 centímetros de alto y 40 de ancho. Su costo de desarrollo es de aproximadamente 1.000 dólares. Se piensa que en el futuro pueda contribuir en tareas de desminado.

Las innovaciones del Centro son parte del proyecto de optimización de recursos. La carencia de ellos a los que fueron sometidas las Fuerzas Armadas en los últimos 12 años alimentaron la creatividad e ingenio.

Un aparato permitirá elaborar pulseras para los uniformados que darán cuenta de su posición, si el usuario ha caído, su ritmo cardíaco, presión o temperatura.

El ingenio permitió además desarrollar un polígono virtual de tiro. El tema está a cargo del capitán Santiago Chamorro. Como no se puede acceder a municiones para una práctica real este sistema busca suplir esa primera necesidad con simuladores acondicionados a las necesidades de los soldados.

Se trata de un kit que reemplaza todas las funciones de un arma. Y para hacerlo más real simula también el retroceso que provoca el disparo. Familiariza al uniformado con el arma que debe portar en la realidad.

Se preparan conferencias magistrales

La inauguración de la Feria será el jueves 20 de junio a las 09:00. Se espera la asistencia del ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, del vicepresidente Otto Sonnenholzner, entre otras autoridades.

Entre los conferencistas está José Miguel Larenas, asesor de Ciencia y Tecnología del Ejército de Estados Unidos.

Él hablará de las investigaciones científicas para el desarrollo de las capacidades de combate del Ejército de su país.

Antonio Franco Crespo, subdecano de la Facultad de Ciencias Administrativas de la Escuela Politécnica, explicará el rol de la academia en el sistema de I+D+i y su impacto en la transferencia de conocimiento de la Defensa Nacional.

Mario Alberto Lizarraga, agregado militar de México en Ecuador, abordará la Industria de la Defensa en México.