Politica exterior y economica a traves de Twitter

Hay que ser ciego y sordo para dudar del predominio estadounidense. Suficiente es seguir lo que está ocurriendo. Días atrás el presidente Trump subió unilateralmente los aranceles a las importaciones de China, dentro de la llamada Guerra Comercial. Las bolsas de valores a nivel mundial en pocos días ocasionaron pérdidas equivalentes a 11 años del PIB de Ecuador.

Hay variación del valor de las monedas y tasas de interés de los bonos corporativos. Los chinos anunciaron retaliación. Se desconoce el tiempo que durará el enfrentamiento y las consecuencias. Además, Trump ha abierto otros frentes: Irán, Rusia y Europa. Internamente, él y su partido tienen guerra abierta con los demócratas que mantienen el control de la Cámara de Representantes. Maneja la política internacional enviando numerosos tuits diariamente desde muy temprano en la mañana. Su forma de gobernar confunde a gran parte de los estadounidenses y aliados, es un pasivo para el mundo, no un activo. Al ser impredecible, cambia de opinión de un día para otro y la Casa Blanca está desconcertada.

Todo el que sigue los acontecimientos de la historia en el largo plazo, puede asegurar que siempre ha existido un poder dominante y lo habrá en el futuro. Fue así en la Antigüedad, Edad Media, Renacimiento, Edad Moderna y Contemporánea. También puede aseverar que el ciclo de vida de ese poder marca su destino. Por algo se han escrito centenares de libros con el título El surgimiento y caída de... Las obras describen lo que sucedió con los grandes poderes.

Su destrucción se origina por fuerzas internas y externas. Ejemplo: Gran Bretaña perdió su predominio a partir de fines del siglo XIX debido a factores políticos, económicos, sociales, tecnológicos, y la I Guerra Mundial.

El descenso de los grandes poderes toma más de un siglo. Durante los últimos años se han visto cambios dramáticos en la sociedad estadounidense. Sigo creyendo que estamos observando el inicio del descenso estadounidense. Los hijos de nuestros tataranietos darán testimonio. El país donde estudié hace más de medio siglo, no es el actual. Es lamentable.

“Se desconoce el tiempo que durará el enfrentamiento y las consecuencias”.