
Los pescadores de Playas celebran fiesta de San Pedro
Humberto Mite, pescador artesanal de 74 años, comenta que le parece mentira que la providencia le haya prestado vida para festejar una vez más las fiestas de San Pedro.
Humberto Mite, pescador artesanal de 74 años, comenta que le parece mentira que la providencia le haya prestado vida para festejar una vez más las fiestas de San Pedro. Él como muchos feligreses ha asistido a todas las novenas del primer apóstol de Jesús, para agradecer por la protección y la pesca de todos los días.
Esta tradicional festividad, celebrada en las caletas pesqueras de la costa ecuatoriana, es festejada en su mayoría por pescadores que colman los templos y dejan ofrendas al santo. No puede faltar el pan, el vino, los peces y artes de pesca puestas al pie del altar.
Ángel Mejillones, de 60 años, presidente de la Cooperativa Las Balsas, recuerda los primeros años de festejos con aquellas grandes procesiones, la imagen de San Pedro estampada en un lienzo, que después fue tallada en madera. Años después los pescadores agrupados en un comité mandaron a hacer una escultura en Ibarra, apoyados por un padre capuchino de nombre Máximo, recuerda Mejillones.
Históricamente, la imagen de San Pedro es una de las primeras que hubo en los altares del templo católico. Desde los inicios de la población, se empezó a celebrar estas fiestas transformándose en rituales religiosos y manifestaciones de cultura y costumbres, que se reflejan en la devoción al santo convertido en el patrono de los pescadores, su santo protector con el paso del tiempo.
Con anticipación se formaba un comité de festejos, uno de estos estuvo liderado por pescadores de balsa como: Silverio Ramírez, Juan Mite, Esteban García y Gregorio Yagual.
Constituida la Cooperativa de Pesca Artesanal Las Balsas, el pescador Carlos Jordán retomó las festividades, revalorizándolas con actividades religiosas, deportivas y culturales, además de las competencias de balsas y pangas de madera a motor fuera de borda.
“Somos herederos del conocimiento ancestral sobre nuestro medioambiente local, nos permitieron explotar de manera sustentable los recursos naturales (pesca en balsa, pozos del algarrobo, ciénegas o albarradas, casas con chacras y animales domesticados, fogones con leña de árboles caídos de guasango, algarrobo, guayacán, negrito y el mangle)”, comentó uno de los asistentes. (F)