Perversion de un docente en Quito
El suceso de perversión sexual por parte de un “profesor” en Quito, que amedrentaba a los estudiantes para que practiquen pornografía luego de difundir ‘videos xxx’ en clase, responde a una patología, consecuencia de estar bajo alguna sustancia estupefaciente.
La corrupción no deja de ser la causa para que este tipo de anormalidades se estén dando a conocer sin ser detectados sino solo después de cometerse el delito o la fechoría.
Ojalá a este antisocial o enfermo mental se le dé la máxima pena para que no se vuelva a cometer este repudiable hecho aún más tratándose de alguien que labora en un centro educativo y a quien confiamos nuestros hijos.
Carlos Luna