Perritos violados y con hambre

La casa luce vacía a un día del rescate de Carmelina, Yukot y Alpas, tres perritos mestizos que recibieron ocho años de maltrato. Los vecinos no salían de su indignación.

Vivían con Daniel (nombre protegido), un hombre de avanzada edad que supuestamente los violó. Carmelina (la hembra) se habría llevado la peor parte, pues los rescatistas constataron que sangraba por sus partes íntimas debido a un fuerte desgarre.

María Tomalá vive al frente del sospechoso en el sur de Quito, ella misma fue quien denunció el hecho y coordinó con la fundación Lucky Bienestar Animal el retiro de los canes. “Me enteré el 19 de noviembre, una vecina me contó que lo vio pero no pudo grabarlo, no había evidencias”, relató la moradora.

▷Lee también: ¡Los ‘ángeles’ de los animales en peligro!

Sin embargo, logró ver que Carmelina sangraba mucho y que no se movía. Además, vio como el hombre la lanzaba, así, sangrando. La mañana del lunes 25 de noviembre se llevó a cabo el rescate. Los moradores buscaron a la policía del sector, interceptaron al hombre e hicieron que abra la puerta de la casa. El escenario: tétrico, lleno de orines y heces de los animales, herramientas viejas, cosas oxidadas y tres animales totalmente asustados.

El hombre no fue detenido, pero la denuncia fue colocada en la Agencia Metropolitana de Control y aún hay que presentar papeles, según Tomalá. Daniel vive en la zona desde hace 40 años, pero los moradores dicen que es una persona de cuidado, sobre todo las mujeres; pues ya ha recibido palizas de maridos indignados por el acoso. “A mí me dijo que si quería darles de comer a los perros tenía que estar primero con él”, relató María Tomalá.

“Lanzó heces, quemó los platos donde comían los perros y las croquetas”, comentó Viviana, otra vecina. Incluso habría amenazado con violarla. Aparentemente ninguna mujer de la cuadra se ha salvado de las palabras y gestos obscenos del hombre de quien no se sabe su edad exacta, pero luce bastante mayor. Vive solo, sumido en el consumo de alcohol, según los testigos.

▷Lee también: ¡Rescatan a perritos que eran violados por su dueño!

Las mascotas siguen en observación médica y su pronóstico es reservado, pues además, estaban desnutridos a pesar de los esfuerzos de la vecindad por alimentarlos. Él nunca lo hizo. Durante los ocho años que permanecieron en su casa, los moradores escuchaban su llanto y sus aullidos, nunca se imaginaron que el maltrato podría llegar a la violación.

En la ley

Hasta septiembre, el maltrato era considerado una contravención y se sancionaba con servicio comunitario.

El 18 de ese mes, la Asamblea Nacional aprobó una nueva normativa: el maltrato animal podrá sancionarse con pena privativa de libertad de entre seis meses a un año. Si se provoca la muerte del animal, la sanción incrementa de uno a tres años de prisión.

La zoofilia también se sanciona con reclusión de seis meses a un año, que puede aumentar hasta tres si el animal fallece. Todavía no se sabe la situación legal del presunto violador.