Elecciones. Alejandro Domínguez ocupaba el cargo interino en el organismo por Napout. Ayer en los sufragios fue respaldado.

El paso de buses y las lluvias forman baches

La avenida 9 de Octubre es una de las zonas regeneradas que tiene la ciudad; sin embargo, el desgaste de los adoquines en algunas de sus intersecciones es causa de malestar tanto para conductores como peatones. Ayer este Diario se hizo eco de un problema recurrente en 9 de Octubre y Tungurahua, donde un hueco obstaculiza el flujo del tránsito, por lo que los conductores deben bajar la velocidad para evitar caer al bache o hacer maniobras inesperadas, lo que repercute en quejas y conatos de choques. El Municipio de Guayaquil informó que concluyeron los trabajos de bacheo en varios sectores de la urbe. Se utilizó hormigón hidráulico para mejorar el estado de las principales calles de la ciudadela Coviem, av. Juan Tanca Marengo, en Colinas de la Alborada, calles Chimborazo y Eloy Alfaro, desde Huancavilca hasta Chiriboga. No obstante, los lectores de EXPRESO manifestaron su descontento en otros sectores donde hay baches de distintos tamaños. Algunos corresponden a un desgaste leve del asfalto; otros son huecos más amplios y profundos. Uno de los sitios advertidos es la esquina de García Avilés y 9 de Octubre, donde una franja de adoquines de colores forma el paso de seguridad vial para los transeúntes. En ese espacio, los adoquines desacomodados y los tramos desgastados de asfalto dan cuenta de que la regeneración no ha tenido mantenimiento, y para su deterioro contribuyen las más de veinte líneas de buses que atraviesan la calle. “Aquí tienen la culpa tanto conductores como los pasajeros que esperan el bus en esa esquina”, opina Manuel Magallanes, un vendedor de periódicos que cada día se ubica en ese sitio con su negocio. Y entre los conductores es muy común ese mal comportamiento, corroboró un equipo de Expreso. Durante varios minutos en el lugar se observó a buses detenerse al inicio de la vía para recoger pasajeros en el espacio destinado al cruce de peatones. En el sector de la ciudadela Álamos Norte, la calle Guillermo Cubillos muestra un gran bache, a la altura de una lubricadora. En ese punto, el tránsito se altera un poco debido a que los conductores que conocen del problema hacen una maniobra para evitar caer en el hoyo. Y los que no lo saben, sufren el impacto. Igual sucede en el callejón de la puerta lateral de la academia Almirante Illingworth, donde varios baches hacen que los conductores tengan que reducir la velocidad de sus vehículos. Al menos cuadra y media de la vía está deteriorada. Otro punto que constató Diario EXPRESO es el paradero de bus en Víctor Emilio Estrada y Las Monjas, en Urdesa.DE LOS DAÑOS en nuestra app GRANASA. Búscanos en App Store y Google Play.