Paises convulsionados

Sobre todo en los últimos meses es notoria una avalancha de desórdenes en los países de América. Lo de Brasil viene desde hace mucho con la destitución de Dilma Rousseff y la prisión de Lula, que logró salir en libertad para querer ser otra vez presidente. Lo de Nicaragua, con Ortega y su mujer matando nicaragüenses. Lo de Argentina, nuevamente peronista, con una delincuente de vicepresidenta y una población a la que solo le importa que gane Boca Juniors. Lo de Chile, el país más sólido, pero con una desigualdad y una Seguridad Social que solo enriquece a las AFP (Asociación de Fondos de Pensiones) y esquilma a sus afiliados que, o pagan sus cuotas lesivas o se mueren. Lo de Venezuela, sumida en la miseria y unas Guardias Bolivarianas que matan si no se obedece a Maduro y Cabello. Lo de Cuba, con su remedo de democracia, exportando médicos y mercenarios que dirigen la sublevación de todos los países miembros del Foro de Sao Paulo. Lo de Uruguay, absteniéndose de acusar al chavismo. Lo de México, con un presidente que ha convertido la patria en asilo de ladrones y lo de Ecuador, con un batallón de correístas fanáticos que minan el presupuesto y escondidos tras los indígenas destruyen Quito, con la complicidad de jueces y Prefecturas. Ese es el resultado del socialismo siglo XXl que habrá que liquidar con el método a escoger.

Carlos Mosquera B.