Entrevista. Fausto Ortiz, exministro de Finanzas del Gobierno de Correa.

Ortiz: La reserva seria de $ 10.000 millones

El terremoto que asoló la costa manabita hace dos semanas trajo a la memoria a economistas y empresarios que hace casi 10 años Ecuador tenía un fondo ahorrado, que de haberlo tenido ahora hubiera ayudado a enfrentar la millonaria reconstrucción del desastre y a superar la estrechez de la economía, adelgazada por la dieta en los precios del petróleo.

El exministro de Finanzas Fausto Ortiz, que estuvo en el Gobierno de Rafael Correa en 2008 cuando se eliminaron esos fondos petroleros, explica a EXPRESO a dónde se ha ido ese dinero en estos años y por qué Ecuador no tiene ahorros.

“Los fondos petroleros se eliminaron, pero pasaron a la reserva y desde ahí cumplieron su función, que era utilizarse para estabilizar la economía”, en un contexto en el que el precio del petróleo se desplomó de 140 dólares por barril a 20 dólares. “Buena parte de los $ 4.000 millones que se perdieron en reservas del 2008 al 2009, eran fondos petroleros que se pasaron allá”, apunta Ortiz.

Pero además de los fondos petroleros, el economista hace un repaso al estado de la Reserva Internacional de Libre Disponibilidad del Banco Central de Ecuador (que se alimenta del excedente petrolero, de lo recibido en endeudamiento y de lo que se deposita en el encaje bancario) desde que el régimen de Correa arrancó hasta ahora. Y hace ese análisis para llegar a la conclusión de que, ante un terremoto, el Gobierno podría tener muchos más recursos de los que tiene ahora.

Según su explicación, “en 2007, cuando comienza este Gobierno, recibe una reserva de $ 2.000 millones y durante meses no hay movimientos mucho más allá de $ 200 millones”, precisa, hasta que comienza la debacle del crudo de 2009. En el mejor mes de 2008 alcanza los 6.500 millones de dólares, pero se desploma a $ 2.500 en 2009 y ahí es cuando se pierden los fondos petroleros.

El problema, sostiene Ortiz, es que desde entonces el Ejecutivo no ha mantenido una política de liquidez que garantice un colchón como el recibido, engrosado y utilizado.

“De cualquier forma que uno calcule, bien sea por estimación de precio del crudo, por política o por PIB o hasta por exportaciones o importaciones, como referencia, nos estaría llevando a una reserva de $ 10.000 millones. Con eso, hubiera sido posible soportar uno o dos años de caída del crudo, para tener espacio para tomar políticas, y un año de desastre natural de mejor forma. Pero al 8 de abril la reserva está en $ 2.400 millones” y, aclara, no todo eso está disponible. SE