Jueces. Jorge Blum y Gladys Terán integran el tribunal para la apelación de Glas. Por Terán irá una conjueza.

Nuevo escenario para Glas

A las 11:00 un tribunal de la Corte Nacional podría revocar la orden de prisión dictada por el juez Miguel Jurado el pasado 2 de octubre.

El vicepresidente sin funciones Jorge Glas se enfrenta hoy a un nuevo escenario judicial que podría abrirle las puertas de la cárcel.

A las 11:00 un tribunal de la Corte Nacional podría revocar la orden de prisión dictada por el juez Miguel Jurado el pasado 2 de octubre. Glas es procesado junto a su tío Ricardo Rivera y otras 16 personas, por supuesta asociación ilícita en el caso Odebrecht.

La defensa de Glas pone sus esperanzas en tres jueces distintos al que originalmente ordenó la medida. Los designados son Luis Enríquez, Gladys Terán y Jorge Blum. De los tres jueces que conocerán el recurso, dos estarán fuera de la Corte a finales de año.

Ellos convocaron para hoy la audiencia de apelación. Uno de los argumentos que podrían correr en favor de Glas para que la orden de detención quede sin efecto es que fue dictada un día después del cierre de la instrucción fiscal (1 de octubre).

Ese es el principal elemento que figura en la apelación presentada por Eduardo Franco Loor, quien asegura que esa prisión “es nula, asimismo las resoluciones sobre medidas cautelares reales personales que se dictaron son nulas”.

Mauro Terán, exjuez de la ex Corte Suprema, no comparte ese criterio. Dice que la revisión de la medida cautelar no era una diligencia instructiva, sino solo de trámite.

Pero Terán ve una contradicción en las actuaciones de la defensa de Glas. “Lo contradictorio es que ellos pidieron otra audiencia para el cambio de medida cautelar”, señala el exjuez. Se refiere al pedido de sustitución de la prisión al que el martes desistió Glas. Y Terán no es tan optimista: “Podría no haber modificación porque los elementos probatorios del fiscal son contundentes”, señala.

En la audiencia de revisión el juez dijo que el pedido del fiscal Baca se hizo dentro de la instrucción. Para solicitar el encarcelamiento de Glas el fiscal argumentó un riesgo de fuga. Mencionó como elementos probatorios la asistencia penal de Estados Unidos que contiene las transferencias de Odebrecht, los testimonios anticipados de tres procesados y del delator de Odebrecht José Santos, que evidenciarían una relación entre Rivera y Glas más allá de lo familiar.