Baile. La afrochoteña muestra sus movimientos con la botella.

La musica y danzas afro se revitalizan

La bomba. Es música hecha por los afros del Valle del Chota, con un instrumental muy propio: la bomba (tambor), guitarra, el requinto o el güiro.

La música, danza, saberes, instrumentos y costumbres, que conforman las tradiciones de los pueblos afroecuatorianos, son parte de la memoria de la cultura de este pueblo, que está siendo rescatada mediante el proyecto de revitalización de la “bomba” (ritmo tradicional afrochoteño).

Édison León dirige el proyecto y la Escuela de Saberes de la Bomba ‘David Lara’ se ha constituido en el primer paso.

Este establecimiento, que funciona en Carapungo, al norte de Quito, es solo una parte del proyecto enrumbado a la patrimonialización de la bomba.

León, oriundo del Valle del Chota e investigador cultural, se inició por el último, por la socialización con los pobladores y la apertura de la escuela, cuando generalmente el plan de salvaguarda se trabaja después de una declaratoria, cuando los técnicos del Instituto de Patrimonio o del Ministerio de Cultura deciden qué bienes tienen que ser patrimonializados.

La Escuela de Saberes de la Bomba terminó su primera etapa y en junio comenzará la segunda.

La inscripción y el aprendizaje son gratuitos y las clases de danza, música, memoria e historia del pueblo afroecuatoriano se realizan los domingos con la dirección de instructores conocedores de cada área.

La escuela es un proyecto en construcción porque “se va desarrollando cada vez que nos juntamos”, comentó.

A través de la música y la danza se resuelven problemas, se encuentra sanación, autorreparación de toda la violencia estructural e histórica que ha venido sufriendo el pueblo afroecuatoriano. (F)