Un día después del ataque de EE. UU. a Irán, Israel redobla ofensiva y crece tensión

El mundo despierta bajo una nueva sombra de tensión tras el histórico bombardeo estadounidense a las instalaciones nucleares de Irán. Un día después de la Operación Midnight Hammer, considerada el mayor ataque con bombarderos B-2 en la historia militar de Estados Unidos, el conflicto entre Irán e Israel ha escalado con velocidad y dramatismo.

Este domingo 22 de junio, el Ejército israelí declaró que ha atacado "todas las bases iraníes" desde las que se lanzaban misiles contra su territorio. Según el portavoz militar, Effie Defrin, las acciones fueron coordinadas con EE. UU. y causaron "daños significativos" al programa nuclear iraní.

“El programa nuclear iraní sufrió daños profundos como resultado de nuestros ataques y del ataque estadounidense de esta mañana”, afirmó Defrin.

Los bombardeos han dejado, hasta el momento, más de 600 muertos en Irán, según cifras oficiales, aunque organizaciones de derechos humanos elevan el número a 850. En Israel, los ataques de represalia de Irán han provocado 24 muertes, además de una víctima indirecta por infarto en un refugio antibombas.

El mayor bombardeo con B-2 de la historia

La ofensiva estadounidense, desarrollada entre la noche del viernes y la madrugada del sábado, involucró más de 125 aeronaves —entre ellas siete bombarderos B-2—, y el lanzamiento de más de 75 bombas y misiles, incluyendo armas antibúnker GBU-57 de 13.600 kilos y misiles Tomahawk desde submarinos.

“Ningún otro país del mundo podría haber llevado a cabo una operación como esta”, declaró el secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien también reiteró que el objetivo no fue un cambio de régimen, sino “neutralizar una amenaza estratégica”.

El jefe del Estado Mayor de EE. UU., general Dan Caine, destacó que Irán no logró detectar el ataque, y sus sistemas de defensa aérea no reaccionaron. “Los cazas iraníes ni siquiera despegaron”, indicó.

De la ofensiva a la diplomacia: EE. UU. invita a negociar

Mientras las operaciones militares continúan, el secretario de Estado, Marco Rubio, extendió este domingo una invitación a Irán para retomar negociaciones nucleares.

“Esta oferta sigue sobre la mesa. Si Irán desea energía nuclear con fines pacíficos, puede lograrlo sin enriquecer uranio. Estamos listos para hablar mañana mismo”, dijo Rubio en entrevistas a Fox News y CBS.

El secretario insistió en que el bombardeo no fue contra el pueblo iraní y advirtió que “lo que pase después depende de Irán”. Washington ha descartado nuevas ofensivas por ahora, pero mantiene su disposición de actuar si la República Islámica responde con más ataques.

Israel: punto de inflexión y ofensiva sostenida

Desde Jerusalén, el jefe del Estado Mayor israelí, Eyal Zamir, declaró que el país ha alcanzado “un punto de inflexión en la campaña contra Irán” gracias al apoyo estadounidense.

“La coordinación entre nuestras fuerzas armadas es un activo estratégico fundamental. Seguimos aumentando el ritmo de nuestros ataques de acuerdo con el plan operativo y estamos preparados para continuar durante el tiempo que sea necesario”, afirmó Zamir.

Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, acudió este domingo al Muro de los Lamentos para ofrecer “una oración especial por la paz del presidente Trump” y por los soldados de ambos países.

Escenario global en tensión

La comunidad internacional observa con preocupación:

• México, a través de la presidenta Claudia Sheinbaum, reafirmó su compromiso con la paz y recordó que “la guerra es el mayor fracaso de la humanidad”.
• Rusia y China han condenado la ofensiva y piden una intervención urgente de Naciones Unidas.
• Europa teme una crisis energética si el estrecho de Ormuz es cerrado.

¿Y ahora qué? Trump, desde la Casa Blanca, fue contundente: “Irán debe elegir entre la paz o una tragedia más grande que la que ha vivido en estos últimos ocho días”.

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