California prohíbe el uso del celular al volante, incluyendo el GPS: ley en vigor
Conducir con el teléfono en la mano será ilegal en todo momento en California, incluso al usar navegación
A partir de este mes, los conductores de California enfrentan nuevas restricciones al volante con la entrada en vigor de una ley que prohíbe completamente el uso de teléfonos celulares mientras se conduce, incluyendo aplicaciones de navegación como el GPS. La medida, impulsada por las autoridades estatales, busca reducir los accidentes de tránsito causados por distracciones, un problema que ha ido en aumento con el uso generalizado de dispositivos móviles.
Un paso más contra la conducción distraída
La nueva legislación, respaldada por un fallo reciente, amplía las restricciones establecidas en leyes previas, como la AB 1785 de 2016, que ya limitaba el uso de celulares para llamadas o mensajes de texto. Ahora, incluso sostener un teléfono para consultar un mapa o una aplicación de navegación se considera una infracción. La decisión responde a la necesidad de cerrar lagunas legales que permitían ciertos usos de dispositivos móviles, los cuales, según estudios en ciudades de California, siguen representando un riesgo significativo en las carreteras.
De acuerdo con datos de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA), en 2023, la conducción distraída fue responsable de 3,275 muertes en Estados Unidos. En California, las distracciones relacionadas con el uso del celular han contribuido a miles de accidentes anuales, desde colisiones menores hasta incidentes fatales. La nueva ley apunta a reforzar la seguridad vial al exigir que los conductores mantengan sus manos libres y su atención en el camino en todo momento.
¿Qué implica la nueva ley?
La normativa establece que los conductores no pueden sostener un teléfono móvil bajo ninguna circunstancia mientras conducen, incluso si el vehículo está detenido en un semáforo. Para usar aplicaciones de navegación, el dispositivo debe estar montado en un soporte fijo, ya sea en el parabrisas, el tablero o la consola central, y solo se permite una interacción mínima, como un toque único para activar una función. Los sistemas de comandos de voz y las conexiones Bluetooth, comunes en muchos vehículos modernos, son opciones recomendadas para cumplir con la ley sin comprometer la seguridad y evitar sanciones.
Aunque la prohibición puede parecer estricta, especialmente para quienes dependen del GPS para navegar en áreas desconocidas, las autoridades destacan que existen soluciones prácticas. Las aplicaciones de mapas modernas, como Google Maps o Waze, ofrecen instrucciones por voz que permiten a los conductores seguir rutas sin necesidad de mirar la pantalla. Además, muchos vehículos nuevos incluyen sistemas de navegación integrados o conectividad Bluetooth, lo que facilita contestar llamadas o ajustar rutas sin manipular un dispositivo móvil.
Los expertos en seguridad vial recomiendan programar las direcciones antes de iniciar el viaje y, en caso de necesitar ajustes, detenerse en un lugar seguro para realizar los cambios. "Algo tan simple como mirar el teléfono puede perjudicar gravemente la vida de alguien, causándole lesiones catastróficas o incluso la muerte. Simplemente no vale la pena mirar las redes sociales ni terminar de escribir", expresó Caleb Kiser, Sargento de la División de Tráfico del Departamento de Policía de Boston (BPD), según señala el medio 23ABC en Bakersfield.
Un esfuerzo continuo por la seguridad vial
California no es el primer estado en endurecer las leyes contra la conducción distraída, pero su enfoque integral refleja una tendencia nacional hacia regulaciones más estrictas. Comparado con estados como Washington y Oregón, donde las leyes son más claras sobre la prohibición de sostener dispositivos incluso en detenciones temporales, California busca alinear sus normativas con los riesgos que representan los teléfonos inteligentes modernos.
Con esta nueva ley, California refuerza su compromiso con la seguridad vial, instando a los conductores a adoptar prácticas más seguras y aprovechar la tecnología disponible para evitar distracciones. Los conductores deberán adaptarse rápidamente a estas reglas para evitar sanciones y, más importante aún, contribuir a carreteras más seguras.
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