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Las tropas del ejército ruso arremetieron ayer contra varias ciudades ucranianas y provocaron varias víctimas civiles, según las autoridades.EFe

Bombazo en un teatro mata a muchos de refugiados en Ucrania

Tropas rusas atacan sin piedad en Mariupol. Las ciudades polacas se están desbordando por los desplazados. Moscú y Kiev avanzan en la negociación

Efectivos rusos bombardearon ayer un teatro que servía de refugio a cientos de personas residentes de la asediada ciudad ucraniana de Mariupol, lo que ha causado un número todavía indeterminado de víctimas, según fuentes ucranianas.

Los militares de Putin también han atacado Zaporiyia y Odesa (sur d Ucrania) y han derribado dos edificios de viviendas.

La Rada (Parlamento) de Ucrania informó que en el interior del teatro, que ha quedado reducido a escombros, había muchos ciudadanos escondidos y que se desconoce si hay supervivientes. Afirmó que en los alrededores del edificio se ha desatado una fuerte batalla y que nadie puede acceder a la zona. Serhiy Orlov, vicealcalde de Mariupol, aseguró que en el teatro se escondían entre 1.000 y 1.200 personas.

El ministro ucraniano de Exteriores, Dmitro Kuleba, aseguró que se trata de “otro horrible crimen de guerra” cometido por Rusia en Mariupol y que el edificio “está completamente destruido”. “Ha habido un masivo ataque ruso sobre el Drama Theater donde se escondían cientos de inocentes civiles”, escribió Kuleba en Twitter, que ironizó con que “los rusos no podían saber que era un refugio civil”.

La situación es desesperada desde hace días en Mariupol, una estratégica ciudad portuaria ucraniana a orillas del mar interior de Azov y situada entre la península anexionada de Crimea y el este separatista de Donbás, por lo que su captura es un objetivo prioritario de Rusia.

En el vigesimoprimer día de la invasión, un teatro de la asediada ciudad de Mariúpol, que servía de refugio a cientos de civiles, quedó reducido a escombros por un ataque ruso

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El Ayuntamiento de Mariupol informó de que desde el inicio de la ofensiva rusa han muerto en esta ciudad ucraniana sitiada 2.187 residentes y que las fuerzas rusas han lanzado más de un centenar de bombardeos aéreos.

Mientras esto ocurría en Mariupol, al menos diez personas más murieron en otro ataque ruso en la ciudad de Chernígov, en el norte de Ucrania, cuando al parecer tropas rusas dispararon contra una fila de ciudadanos que esperaban para comprar pan, informó el Servicio Estatal de Comunicaciones Especiales y Protección de la Información de Ucrania.

Un corresponsal del medio local Suspilne, que dijo ser testigo del incidente, también informó del tiroteo y confirmó el número de víctimas mortales, que situó en una decena, según informó Interfax-Ukraine.

Mientras los bombardeos no se detienen en varias ciudades de Ucrania, la llegada masiva de refugiados comienza a desbordar la capacidad pública de acogida en grandes ciudades polacas, donde surgen iniciativas privadas como la de un centro comercial en Cracovia reconvertido en albergue y que distribuye ropa donada.

Según informó ayer el Gobierno polaco, de los 3 millones de desplazados que hasta ahora ha dejado la guerra, son ya 1,9 millones los que han llegado a Polonia, donde crece la presión sobre los servicios de acogida, cuya capacidad está al límite.

Los gobiernos de Varsovia y Cracovia han incrementado sus poblaciones en un 15 % en tan solo tres semanas.

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha justificado que la invasión se produjo para parar un “genocidio” contra la población prorrusa del Donbás y ha asegurado que “la operación militar es un éxito”.

El papa Francisco pronunció ayer al final de la audiencia general una oración para pedir la paz por la guerra en Ucrania, tras la invasión rusa, que comenzó con: “Perdónanos la guerra, Señor”.

“¡Señor Jesús, nacido bajo las bombas de Kiev, ten piedad de nosotros! ¡Señor Jesús, que murió en los brazos de su madre en un búnker en Kharkiv, ten piedad de nosotros! ¡Señor Jesús, enviado veinte años al frente, ten piedad de nosotros! ¡Señor Jesús, que aún ves manos armadas a la sombra de tu cruz, ten piedad de nosotros!”, rezó el papa Francisco ante el silencio sepulcral del auditorio. Todos rechazan la guerra.