Militares refugiados en Nizag son rescatados por un helicoptero del Ejercito
Los uniformados abordaron la aeronave con destino a Riobamba.
La imagen de niños regalando maíz tostado a los 56 militares que trataban de llegar a un helipuerto en la zona de la Nariz del Diablo, Alausí, para ser rescatados por el Ejército se difundió en las redes sociales este lunes 7 de octubre.
El gesto de los pequeños se dio al paso de los uniformados que dejaban el sector de Nizag para abordar la aeronave con destino a Riobamba; sin embargo, el mal tiempo en la zona obligó a que sean trasladados a Guayaquil.
Se distribuyeron en tres grupos. El primero, que salió a las 14:45, lo integraba un oficial y 16 voluntarios. Pasadas las 15:00, salió el segundo grupo de militares, que fueron retenidos el sábado por los comuneros de Nizag acusados de agredirles con gases lacrimógenos mientras intentaban despejar la panamericana. El tercer grupo en ser extraído de la zona lo conformaron dos oficiales y 20 voluntarios y su salida debía darse cerca de las 16:00.
En un primer intento por dejar la comunidad, los militares y cinco policías de Inteligencia fueron liberados el domingo por la tarde. Pero la amenaza de miembros de otras comunidades, ubicadas en las zonas altas del sector, les obligó a los militares a retornar a la zona en donde recibieron protección, alimentación y seguridad de parte de los comuneros de Nizag.
Mientras que los miembros de Inteligencia tuvieron que esconderse en las montañas de Alausí hasta llegar al pueblo en donde fueron rescatados la mañana de este lunes 7 de octubre.
Los militares en cambio tuvieron que esperar casi un día más hasta el arribo de la ayuda de sus compañeros militares. Fueron liberados el domingo por la tarde, pero tuvieron que volver al pueblo frente a la amenaza de comuneros de las zonas altas de aplicarles la justicia indígena.
La operación militar concluyó cerca de las 16:00. Los militares se mostraron agradecidos con los miembros de la comunidad que la noche de este domingo les brindaron protección frente a las amenazas de otros comuneros que buscaban agredirlos.
