
Migrantes en EE. UU. se ponen en guardia
El Gobierno ecuatoriano tomará previsiones para enfrentar la posible deportación de migrantes que están en situación irregular en Estados Unidos, tras los anuncios del nuevo mandatario estadounidense, Donald Trump.
El Gobierno ecuatoriano tomará previsiones para enfrentar la posible deportación de migrantes que están en situación irregular en Estados Unidos, tras los anuncios del nuevo mandatario estadounidense, Donald Trump.
En los próximos días, la Cancillería presentará oficialmente un plan de contingencia, contó a EXPRESO una fuente del servicio exterior.
Trump amenazó con redoblar los controles migratorios y fortalecer la seguridad fronteriza con la construcción de un megamuro de 3.000 km en la frontera con México. Su plan contempla también recortar fondos a las ciudades que acojan migrantes sin documentos.
Frente a esas advertencias, la comunidad tricolor en el país norteamericano está asustada y preocupada. Eso dijo a EXPRESO Linda Machuca, cónsul en Nueva York. Ella contó que al día siguiente de las elecciones presidenciales, los connacionales empezaron a inscribir a sus hijos nacidos en EE. UU. en el consulado. También pidieron pasaportes e identificaciones consulares. “Están preparándose para cualquier eventualidad”, comentó.
Agregó que los compatriotas han preguntado sobre los programas gubernamentales para regresar a Ecuador. Por ejemplo, el plan Bienvenidos a Casa, que permite traer el menaje del hogar y un vehículo.
La cónsul pide que los migrantes se informen a través de los canales oficiales. “Hay algunos que quieren sacar provecho y pueden ofrecer la regularización que no existe. Deben estar atentos para que no los estafen”, advirtió.
Según cálculos oficiales y de las asociaciones de migrantes, en Estados Unidos residen más de 1’000.000 de ecuatorianos. De ellos, unos 400.000 tienen papeles, de acuerdo con el Centro de Investigaciones Pew, una organización con sede en Washington que brinda información sobre problemáticas sociales.
Jaime Moreno, quien reside en Chicago desde 1976, coincidió en que “existe una gran preocupación por las amenazas de Trump. Tenemos miedo a que se reinstale la supremacía blanca”, dijo vía telefónica a este Diario.
Él considera que hay discriminación contra los hispanos y las minorías. “Hay ecuatorianos que han querido suicidarse por los anuncios de Trump. Son los recién llegados. Hicieron préstamos de $ 25.000 a los chulqueros para pagar a los coyotes”.
Hay otros más optimistas. Oswaldo Guzmán, presidente del Comité Cívico Ecuatoriano, vive desde hace 35 años en la Gran Manzana. Confía en que Trump solo deporte a las pandillas de ladrones y criminales. “Es muy temprano para saber lo que ocurrirá”, advirtió. Sin embargo, pide que los consulados busquen asesores legales y abran centros de información.
William Murillo, exsecretario de Migración, cree que el escenario podría ser peor. Recordó, por ejemplo, que el nuevo mandatario estadounidense advirtió que terminará con el DACA, que es la Acción Diferida para los llegados en la infancia a EE. UU. Se trata de un programa creado en 2012 que protege temporalmente de una deportación y otorga un permiso de empleo al cumplir con todos los requisitos.
“Vienen momentos difíciles. Habrá muchas deportaciones y violaciones a los derechos de los migrantes. Familias enteras se romperán”, aseguró.
Pero, además, hay otros que apuestan a las leyes locales y no creen que las deportaciones inicien en un futuro cercano. Estados Unidos es un país de normas y aunque el primer mandatario amenace, su propuesta primero debe ser aceptada por el Senado y el Congreso, reflexionó Onías Pacheco, director ejecutivo de la organización Integración Ecuatoriano-Americana. Él lleva residiendo 40 años en Nueva York. “Aquí se protege a los indocumentados”, señaló.