Lemian y Eddy son dos de amigos cuyo gusto por el rock, los llevó a hacer locuras al momento de fusionar los ritmos.

Maldad Elegante

La banda guayaquileña asegura ser un experimento humano como ‘Frankenstein’.

Es una banda independiente nacida en Guayaquil y cuya música, según sus miembros, es un equilibrio entre lo agresivo y lo tierno, Manifestándose en música y letra con el objetivo de ser diferentes. Así lo señala Eddy Ram, el vocalista de Maldad Elegante.

“Hacemos rock, no sabemos cómo definir nuestro estilo ya que cada canción es distinta a la otra. El día que compilemos todo en un disco verán que podemos llegar a todo estilo de público y sentimientos. Puedo decir que es una especie de ‘Frankenstein’ con miembros de diferentes personas en un solo cuerpo. Así es como nos vemos”, señala Eddy.

Lemial Rugel (primera guitarra) comenta que desde niños, la música corre por sus venas y lo interesante ahora es la fusión de estilos, sentimientos, colores y sabores.

En abril pasado, durante una noche de vinos, cuentan que dejaron de correr un loop de 90 Bpm, eligieron una sola nota y empezaron a improvisar por más de 20 minutos sin detenerse. “La conexión que hemos tenido siempre hizo que salga algo muy loco e interesante pero ya estábamos satisfechos con aquella magia y decidimos detener la grabación con el celular para escuchar. Entonces ahí nos dimos cuenta una vez más que fuimos, somos y siempre seremos Maldad Elegante”.

Los integrantes de la agrupación conformada también por Fernando Paredes y Santiago Celley, se definen como sarcásticos, divertidos, revolucionarios, estúpidos, músicos, filósofos, consoladores y realistas.

Por lo pronto están reuniendo suficiente material para grabar algo bueno para sus futuros seguidores.