
El ‘chivo al hueco’, un platillo tradicional en Zapotillo que llama la atencion a los visitantes
Lugar. Para llegar a Zapotillo se debe ingresar a Loja por las parroquias Mangahurco, Cazaderos y Bolaspamba, otra vía es por el cantón Arenillas.
En la provincia sureña de Loja se puede degustar gran variedad de gastronomía que encanta a los turistas que llegan. Uno de los cantones más visitados es Zapotillo por el florecimiento, con las primeras lluvias de enero, de los majestuosos guayacanes de flores amarillas.
Los lugareños están preparados para recibir a los visitantes con platos típicos de la zona, como el sango de maíz, el seco de gallina criolla, seco de chivo, pasteles de gallina y el tradicional ‘chivo al hueco’, que se prepara por años.
Mercy Meca Córdova, oriunda de la parroquia Mangahurco, del cantón Zapotillo, dijo que para hacer este plato tienen que buscar un lugar en que la tierra esté seca, que no tenga filtración de agua. Ahí empiezan a excavar con una barreta hasta hacer un hueco redondo, de ochenta centímetros. Después colocan leña seca y ponen la olla con la carne de chivo, tapan el hueco colocándole hojas de zinc para que no le caiga tierra una vez que empiezan a enterrar.
Mercy resaltó que el trabajo de la preparación del plato lleva varias horas: primero tienen que matar al chivo, después despresar la carne, comenzar con los aliños de la preparación: ajo, comino, pimiento, cebolla blanca, cebolla roja, limón, cerveza y naranjilla. No le ponen agua.
Todo este preparado lo deja cocinar en dos horas “si es un chivo viejo, el tierno en una hora está listo”.
Meca cocina este plato típico hace muchos años, mientras que sus familiares y amigos lo venían haciendo desde hace décadas. Trabaja con su esposo y sus tres hijos.
Cada plato de ‘chivo al hueco’ lo vende en cinco dólares.
Además, en Mangahurco se pueden encontrar los famosos pasteles de doña Eulidia Córdova, una adulta mayor que prepara este platillo desde los veinte años de edad. Este es el sustento de su familia. (F) FI