Ingreso. La aplicación de origen español inició sus operaciones en junio del año pasado en Ecuador.

Las ‘apps’ de entrega crecen por el desempleo

Compañía Glovo cumple un año en Ecuador y suma unos 1.000 repartidores. En Quito y Cuenca el 50 % son venezolanos.

La situación laboral en el país ha sido uno de los factores para la expansión de plataformas de ‘delivery’ o entregas como Uber Eats o Glovo, que ayer cumplió un año de operaciones en Ecuador.

En ese tiempo, Glovo ya suma unos 1.000 repartidores en Quito, Guayaquil y Cuenca, aseguró Daniel Arévalo, general mánager de Glovo en Ecuador. “Esta industria vuela”, añade.

Personas que no cuentan con un empleo han optado por opciones como Glovo y esto, según Arévalo, dinamiza el mercado laboral del país.

Otro ingrediente se suma al crecimiento de repartidores de las aplicaciones en el país: la migración venezolana. Según Glovo, en Quito y Cuenca el 50 % de los repartidores son de esa nacionalidad. Mientras que en Guayaquil la cifra llega al 15 %.

En octubre del año pasado, Uber Eats aseguró que en Ecuador contaba con 1.000 repartidores y 400 restaurantes.

EXPRESO conoció que la aplicación colombiana Rappi, que también se especializa en entregas, prepara el terreno para desembarcar en Ecuador. Actualmente, la aplicación ya está disponible para descargarse en los teléfonos del país, pero por ahora solo funciona en Argentina, Brasil, Colombia, México, Perú y Uruguay.

Sin embargo, las plataformas siguen siendo cuestionadas desde diversos sectores que piden mejores beneficios y seguridad para los trabajadores.

Según un reporte de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las plataformas digitales, contrario a mejorar las condiciones de los trabajadores en América Latina, participan como intermediarios y se quedan la mayor parte de la ganancia, abonando al subempleo y la informalidad.

“Las innovaciones tecnológicas (...) han llevado al surgimiento de un acuerdo de trabajo que se ha denominado “trabajo diario digital”. Este comparte muchas de las características del trabajo de los jornaleros tradicionales, pero el enganchador ha sido reemplazado por plataformas digitales que conectan la oferta y la demanda”, advierte el reporte El futuro del trabajo América Latina y el Caribe.

Según las últimas estadísticas de empleo del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), la tasa de empleo adecuado o pleno cayó 3,2 puntos porcentuales frente a marzo de 2018. Esto significa que en el último año un total de 261.767 personas perdieron su empleo pleno o adecuado.

El año pasado, el exministro de Trabajo, Raúl Ledesma, dijo que se estudiaba una normativa para regularizar el trabajo en aplicaciones, pero hasta ahora solo ha sido un anuncio.