Percance. Labores de rescate del bus que cayó a un despeñadero.

Lluvias dejan tres muertos en Manabi

Los torrenciales aguaceros caídos en las primeras horas de ayer en los cantones Portoviejo, Pedernales, Jama, Calceta y Pichincha, en Manabí, dejan como resultado, hasta ahora, tres personas muertas, ocho heridos, casas inundadas, un bus destruido y po

Los torrenciales aguaceros caídos en las primeras horas de ayer en los cantones Portoviejo, Pedernales, Jama, Calceta y Pichincha, en Manabí, dejan como resultado, hasta ahora, tres personas muertas, ocho heridos, casas inundadas, un bus destruido y postes de alumbrado y árboles caídos en las vías.

Un bus de la cooperativa de transporte Reales Tamarindos, que cubría la ruta Pichincha-Portoviejo, perdió pista en el sitio La Azucena, en medio de una pertinaz lluvia. El hecho fue reportado por el ECU-911. En un aparente deslizamiento de tierra, el vehículo cayó a un abismo de aproximadamente 30 metros de profundidad. El percance dejó tres fallecidos y ocho heridos que fueron trasladados a varias casas de salud de los cantones Pichincha (Manabí) y Quevedo (Los Ríos).

Socorristas del Cuerpo de Bomberos, Policía, ECU-911 y paramédicos de Calceta, Pichincha, Quevedo y Portoviejo participaron en las labores de rescate de las víctimas.

El trabajo de los rescatistas se extendió por más de cinco horas, en vista del difícil acceso al sitio.

“Por la profundidad del lugar y el mal tiempo, se pidió refuerzos para poder sacar los cuerpos. El terreno es muy dificultoso. Se pudo extraer temprano a uno de los fallecidos. A los otros dos que estaban debajo del micro, se los pudo sacar más tarde”, reportó uno de los bomberos.

Los rescatistas utilizaron una grúa para mover el automotor y poder sacar uno de los cuerpos, según se informó.

Los fallecidos en el accidente fueron identificados como Jacinto Mendoza Álava, Ricardo Alvarado Moreno y Jorge Vera Cedeño, oriundos de la parroquia Calderón, de Portoviejo.

“Solo sentimos cuando el carro iba rodando cuesta abajo. La gente gritaba por todos lados. La mayoría de los pasajeros iban dormidos. Yo me prendí del asiento y me encomendé a Dios. Cuando ya el carro se quedó incrustado en unas piedras, empezamos a salir y vimos tres personas que habían muerto”, testimonió Lucía Cevallos, una de las personas sobrevivientes.

La mujer, que presentaba golpes leves, se encuentra en una casa de salud del cantón Pichincha. Se desconoce si entre los heridos se encuentra el conductor del micro.

En el rescate de los sobrevivientes y los cuerpos de los fallecidos participaron más de 80 socorristas. La policía controló el tráfico vehicular. HLV