“En publicidad cada detalle importa para valorar lo que se quiere vender”

Leí el caso de Dani Mateo, humorista español quien enfrenta denuncia interpuesta por la organización Alternativa Sindical de Policía por usar la bandera de España como pañuelo en un momento del programa El intermedio de la sexta”, atribuyéndole la supuesta ejecución de delito de ofensa o ultraje a símbolos patrios de España, efectuado con publicidad y delito de odio.

El humorista protagonizó un sketch en el que leía el prospecto de Frenadol, simuló estornudar y se sonó la nariz con la bandera de España. Antes de retirarse exclamó: ¡Hostia, perdón, qué he hecho? en tono humorístico.

La broma trajo como consecuencia la cancelación de la campaña publicitaria de dicho producto. Siendo el producto de origen español, no justifica el rol asignado a la bandera de España al momento de publicitarlo; el objetivo de la publicidad es impactar, el éxito es diferenciar cuando es a favor y en contra.

Este hecho es ejemplo para recordar lo importante de valorar cada detalle que se incorpora en publicidad o en cualquier actividad que se realice en una empresa, en ocasiones desestimar consecuencias y utilizar ‘whatever’ (lo que sea) recurso para salir del paso, destruye la estructura creada, como es la del caso citado, convirtiéndose en desperdicio de esfuerzo, tiempo y recurso financiero.

Eco. Marysol del Castillo