“Mientras luchen por separado seran vencidos siempre”

La política ecuatoriana tiene actitudes antiguas y nuevas, de condición negativa, que persisten de manera férrea y se mezclan. Estas son: el síndrome del general , el figureteo, tener seguidores y no líderes.

La primera: todos quieren mandar, todos son presidenciables y no aceptan ni en sueños las alianzas ni ser binomios sabiendo que ello sería la fórmula que inspire voto, aunque el discurso utilizado sea diferente, el ego es más fuerte.

La segunda, ansia extrema de posar en fotos pero no aportar nada. La tercera, mal antiguo, no hay relevo de líderes porque no los han formado y es en la hora cero, donde es más evidente que a ninguno les da la horma, impidiendo así que el relevo generacional se produzca y pegue fuerte, tal pegamento de carpintero.

La contradicción es un pésimo referente de conducta en los humanos y se acentúa más en los políticos por lo cual los nuestros deberían analizar no adoptarlo ni en broma.

Tácito dijo “Mientras luchen por separado, serán vencidos juntos”. El tiempo pasa y pareciera que lo actuado en cuanto a “unión” fue carrera de caballo y parada de jumento. La Biblia en Mateo 22:14 nos dice: Muchos son los llamados pero pocos son los escogidos. Eh ahí la razón y reflexión para los creyentes, la pelota está en la cancha a la espera del juego.

Francesco Aycart Carrasco