“Ni la edad ni la responsabilidad familiar deben ser un impedimento para estudiar”

El estar casados, ser padres de familia o mayores de 30 años no puede impedir a hombres o mujeres que sigan estudiando alguna carrera universitaria en los centros de educación superior; por el contrario, los ciudadanos cuando llegan a la madurez se vuelven más responsables porque tienen claros los objetivos y metas que deben cumplir para triunfar en la vida. Así, el pasado jueves me invitaron a una ceremonia de incorporación en la facultad de Ciencias Naturales de la Universidad de Guayaquil, donde quedé gratamente impresionado por la brillante sustentación de la tesis de grado de un humilde ciudadano de 40 años, oriundo de Yaguachi, que se incorporó con 10/10 de ingeniero geólogo, así como también me conmovió la enorme alegría que expresó al obtener el título profesional que dijo le permitirá mejorar las condiciones de vida de su hogar conformado por su esposa y dos hijos. Pero, en cierto momento se puso triste cuando contó el caso de un primo, que vive en la ciudadela La Floresta de Guayaquil, a quien su madre que trabaja de enfermera lo mantiene encadenado en la casa (porque es un adicto a la heroína “H”) y anda gestionando un préstamo para someterlo a un tratamiento avanzado de desintoxicación de la sangre en los Estados Unidos.

Jhonny Muñoz Lima