
La jubilacion de los afiliados actuales no esta garantizada
La sostenibilidad de las pensiones estará en aprietos para 2022. Nuevos estudios actuariales muestran alternativas para evitar la quiebra del IESS.
La situación pasó de grave a crítica. El Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) tiene los años contados si no se aplican cambios urgentes. Lo dice el borrador del informe actuarial que se redactó al interior de la entidad.
El documento, de 121 páginas que debe ser aprobado por el Directorio de la entidad, fue entregado a las autoridades hace pocas semanas y muestra, entre otros puntos, que si el gobierno retira el aporte del 40 % para las pensiones de jubilados (como hizo el expresidente Rafael Correa durante tres años) el fondo no podrá subsistir por más de cuatro años. Es decir, las pensiones de los jubilados ya no serían sostenibles en 2022.
Pero el aporte gubernamental del 40 %, que fue reinstaurado por el presidente Lenín Moreno, tampoco representa una garantía de estabilidad. Aunque se mantenga, el fondo no podría sostenerse más allá de 19 a 23 años. En 2042 los aportantes actuales no podrían acceder al beneficio de jubilación del Seguro Social.
En dinero, el reporte actuarial es aún más preocupante. Sin la contribución estatal, el déficit del Fondo de Vejez, Invalidez y Muerte tendría un saldo negativo de 96.679 millones de dólares para 2022. Una cantidad imposible de cubrir.
Con el aporte del Estado, en cambio, en 23 años el mismo fondo tendría un hueco de 20.738 millones de dólares. Aunque menor, la cifra resulta insostenible para el instituto.
El dato llama la atención porque, según el borrador, se necesitan medidas urgentes para evitar el escenario negativo. Una de ellas, planteada también por los integrantes del Consejo Directivo del IESS, es la revisión de las condiciones de edad y tiempo de aportación para la jubilación.
Incrementar y cambiar las condiciones para los afiliados que actualmente aportan al Seguro no es el único camino recomendado. El informe actuarial recomienda “actualizar el valor de los bienes inmuebles de propiedad del fondo [...] y proceder a la venta inmediata”.
También solicita que el Banco del IESS efectúe inversiones que cubran las tasas que tiene la entidad. Algo que se descuidó en la administración anterior.
La redacción y presentación del informe era una deuda pendiente de las autoridades del Seguro Social. La Contraloría General del Estado determinó, en un examen que se publicó el año pasado, que los estudios actuariales de 2015, durante el régimen de Correa, tenían anomalías y montos exagerados y sin sustento. Así, los delegados del exmandatario pudieron tomar decisiones que afectaron a la entidad.
EXPRESO publicó ayer que las decisiones políticas que se tomaron en el Seguro afectaron en 9.239 millones de dólares a la institución de todos los ecuatorianos. El hoyo generado aún no tiene un indicio de solución.
La eliminación del 40 % y la redistribución de recursos fueron los principales males.
Salarios
Los informes y proyecciones que se redactaron durante el Gobierno del expresidente Rafael Correa aseguraban incrementos salariales del 10 % anual. Una cifra lejana a la realidad. El informe borrador al que accedió este Diario tiene incrementos moderados de menos del 3 % anual.
Inversiones
Durante el régimen de la autodenominada revolución ciudadana se hicieron inversiones con dinero del IESS que perjudicaron a la entidad. En el actual Gobierno se modificaron esos rubros y se llegó a acuerdos para parar inversiones en proyectos estatales que no dieron frutos.