Contrato. La relación laboral entre Francesco Totti y la Roma termina el 30 de junio, ‘Il Capitano’ quiere seguir jugando.

UN INESPERADO FINAL PARA TOTTI

Decir Francesco Totti es decir la Roma y viceversa. Es una vieja historia de amor que lleva más de 25 años y que pocos pensarían que podía terminar, menos, de la forma como está acabando.

Decir Francesco Totti es decir la Roma y viceversa. Es una vieja historia de amor que lleva más de 25 años y que pocos pensarían que podía terminar, menos, de la forma como está acabando.

La leyenda y capitán del equipo de la capital italiana está dolido por el trato que está recibiendo del entrenador Luciano Spalletti, quien le concede pocos minutos en cancha. Aparentemente el estratega ya ve en el jugador de casi 40 años una baja en su nivel físico, porque el talento sigue intocable, ese que no se pierde jamás.

La piedra de toque se dio tras unas declaraciones de Totti cuando calificó como un irrespeto el trato que estaba recibiendo. “El banquillo me hace daño. Entiendo que a mi edad juegue menos, pero terminar mi carrera así es feo para alguien que lo ha dado todo por la Roma”, fue lo dicho por el ofensivo, algo que tuvo eco en el estratega que lo apartó de la concentración en el partido contra el Palermo. La Roma goleó 5-0, pero del duelo quedó la ovación a Totti mientras llegaba al estadio y los reproches a Spalleti, con gritos a favor del capitán romanista.

Spalletti quiso apaciguar los ánimos anunciando su vuelta a las prácticas, como se dio el pasado lunes. “No fue un castigo que se fuese a la grada. Quizás el entrenador no lo vio calmado y decidió que era lo mejor”, dijo Mauro Baldissoni, director general del club, que le pudiese ofrecer una vicepresidencia o continuar en la plantilla como ayudante del entrenador, pero el futuro de Totti podría estar en la Superliga china o en el fútbol de Estados Unidos, algo impensado para muchos que pensaban que su única camiseta sería la de la Roma.