La industria plastica disena su politica para el reciclaje
Los industriales elaboran junto al Gobierno, una propuesta de ley. Buscan que la norma reemplace la ordenanza municipal que regula el plástico de un solo uso.
Tras más de 60 años de vida, la industria de plásticos del país se plantea un renacimiento. Uno más consciente y amigable con el medio ambiente, que la lleve a embarcarse hacia una economía circular. Es que para contaminar menos, dicen los industriales de este sector, no hace falta ni reemplazar ni erradicar al plástico, sino reciclarlo.
Es la ruta que el sector buscará reforzar y para ello trabaja, junto al Gobierno, en una propuesta de ley, que fije parámetros del reuso que debe tener el material en sus procesos de producción. Así lo anunció la noche del pasado martes, Alfredo Hoyos, presidente de la Asociación Ecuatoriana de Plásticos (Aseplas), durante la inauguración de la feria anual del gremio que busca difundir tendencias y nuevas herramientas para mejorar la eficiencia.
La noticia se da a conocer en un momento en que una ordenanza municipal ha empezado a regular en Guayaquil la fabricación y comercialización del plástico de un solo uso. La iniciativa, dice Hoyos, es buena, pero inalcanzable. “Nosotros estamos buscando valores que podamos lograr. Mientras la ordenanza municipal habla de fabricar fundas hasta con un 70 % de material reciclado, nosotros estamos proponiendo iniciar con un 40 %-50 %”. Algo parecido se aplicaría en la elaboración de tarrinas plásticas, envases de foam y otros materiales. “Con esto no buscamos parar la ordenanza, sino establecer reglas al alcance de lo que podemos hacer”, y con ello asegurar que las más de 300 empresas de plásticos que operan en el país puedan embarcarse al cambio.
El borrador está casi listo, asegura. En este se plantea a la política de reciclaje como única salida. No creen conveniente la adopción de materiales biodegradables: es caro y aunque, a diferencia del plástico, puede llegar a degradarse en poco tiempo, su fabricación también deja una huella contaminante y demanda el consumo de recursos naturales. “Por cada 500 hojas de papel, deben emplearse 5.000 litros de agua”, dice Hoyos.
La idea es que con esta nueva normativa el sector pueda acelerar y masificar las prácticas de reuso que iniciaron en 1995 y que hoy lo ubican, a nivel general, en niveles de un 30 % reciclaje. “Si yo produzco 100 envases, pero reutilizo 70 y 30 los convierto en energía voy a tener cero desperdicios. Esto que parece una quimera ya se da en países como Austria, Suiza, Alemania, Noruega”, sostiene Hoyos.
Hugo Yep, representante de Braskem, una de las petroquímicas más importantes de Brasil, apunta como necesario deshacerse de los mitos que hacen creer a la ciudadanía que el uso de plástico es malo. En su país, una alternativa ha sido posicionar la economía circular, que obliga a optimizar el consumo de materias primas y energía tomando como base el funcionamiento de ecosistemas: se usa la menor energía posible y todo se reutiliza. No obstante, Yep menciona que nada se logra con un buen manejo de disposición de residuos, un cambio que debe empezar con la educación que se imparte en instituciones académicas, pero también con políticas que fomenten esta práctica en gobiernos locales.
Él será uno de los 10 expositores internacionales que participará en la IX edición de la feria Iplas 2019, donde el sector podrá conocer nuevas tecnologías y herramientas ecoamigables. Una opción la tiene Radek Pavelec, de la firma española Reverté. Él demostrará cómo con el uso de carbonato de calcio, un mineral que se obtiene en canteras, hoy está permitiendo en el mundo reducir la cantidad de polímeros en el producto final.
Congreso
Una feria que congrega a 16 países
El centro de Convenciones de Guayaquil, es el escenario de la IX edición de la feria internacional Iplas 2019, donde se congregarán representantes de 16 países de este sector.
La jornada que se desarrollará hasta este viernes, desde las 16:00 hasta las 21:00, incluirá charlas con expositores internacionales y la exposición de la oferta tecnológica de 110 estands. La mayoría concentra su oferta en máquinas recicladoras y herramientas que mejoran la productividad, aún empleando un menor uso de resinas.
