
Los hoteleros se suman a la meta del turismo de negocios
Por cerca de una hora la mañana del pasado lunes en el Salón de la Ciudad, Arnaldo Nardone, un asesor de origen uruguayo, definió las bondades del turismo de negocios, ferias y congresos.
Por cerca de una hora la mañana del pasado lunes en el Salón de la Ciudad, Arnaldo Nardone, un asesor de origen uruguayo, definió las bondades del turismo de negocios, ferias y congresos.
Frente a un grupo de invitados, conformados por hoteleros y profesionales civiles, aseguró que cada año se organizan 120 mil reuniones en todo el planeta. Que este es un negocio que dura todo el año y que no lo afecta las crisis, que lo único que se debe obtener es una base de datos que contenga una lista de las asociaciones, gremios, instituciones y hasta entidades públicas que organizan estos eventos.
Mencionó que como los beneficios que con cada cita organizada en Guayaquil recae en varias actividades económicas -el negocio hotelero, de transportes, de comidas, de servicios...- al igual que en diferentes segmentos de la población -el empleado del hotel, el que transporta la materia prima para el negocio de alimentos...- el plan que tiene la Empresa Pública Municipal de Turismo, que preside Gloria Gallardo, debe comprometerse toda la ciudad.
De ahí surge el programa de embajadores. Lo que se propone es “trabajar juntos el sector público, privado y la sociedad en general para hacer de Guayaquil un destino líder en turismo de reuniones”, le dijo a EXPRESO Gloria Gallardo.
Sobre esta propuesta que hace la Empresa Pública Municipal de Turismo, Morice Dassum, gerente del hotel Hilton Colón, considera que será un aporte importante. “Se nota que ya hay un criterio y trabajo profesional”.
Dassum reconoce que esto de salir en busca de congresos y reuniones no es un trabajo fácil. En el Hilton Colón hay experiencia sobre esto. “Cuando abrimos el hotel, necesitábamos ocupar las habitaciones (294), por eso decidimos asistir a las ferias internacionales donde hicimos contactos con los organizadores de congresos”.
Carlos F. Cruz, quien preside la Asociación Hotelera del Guayas, cree que la idea de abrir el abanico de invitados es muy importante. “Porque no solo los hoteleros se benefician de una cita o un congreso”.
Esto es parte de un proyecto que comenzó a trabajarse desde hace tres meses con Nardone, a quien el Consejo Mundial de la Industria de Turismo y Reuniones consagró en el 2016 como el más influyente del mundo en esta actividad.
El programa de embajadores será presentado en la última semana de agosto y promoverá que no solo los hoteleros, sino que también los gremios de profesionales, se conviertan en aliados en el proceso de convertir a la ciudad en un destino de negocios y congresos.
“Son ellos los que tienen los contactos”, dice Nardone. “Si se trata de un congreso de pediatría, qué mejor que los colegas locales vayan a convencer a los de la Asociación Latinoamericana de Pediatras para que definan a Guayaquil como el mejor lugar para su próximo encuentro”.