De 5G se habla todos los días... Que China lidera el despliegue y no Estados Unidos, que en 2025 esta tecnología representará el 15 % de las conexiones móviles mundiales, que en Ecuador; el Gobierno ya tiene planificado cuál será el espectro radioeléctrico por donde se desplegará la nueva red y que Claro ya realizó sus primeras demostraciones en septiembre.

Pero, ¿cuál es la verdadera noticia? Que estamos ante la clave para el desarrollo de las ciudades inteligentes, las telecomunicaciones, la domótica, la industria 4.0, la automatización, el transporte... Que no solo la velocidad es la clave.

Los escenarios que nos esperan en un futuro, no tan lejano, van más allá de las velocidades de descarga inimaginables. El desembarco de las redes 5G vendrá acompañado de entornos de máquinas que se comunican entre sí, de carros autónomos que por fin podrán circular más allá de San Francisco, de cirugías a distancia, de entregas a domicilio aéreas... y también de nuevos riesgos virtuales.

Las compañías tecnológicas lo ven como la ‘next big thing’ (nueva gran cosa); un acontecimiento que lo cambiará todo y que dará paso tanto a nuevos productos, como a servicios.

Es más, desde Huawei creen que se trata de “la nueva electricidad”. Mientras que GSMA calcula que contribuirá con $ 2,2 billones a la economía global en los próximos 15 años, con sectores clave como la industria, los servicios públicos, profesionales y financieros, que serán los más beneficiados por esta nueva tecnología.

Descargas en segundos

Nuestros móviles podrán descargar juegos y películas mucho más rápido: en un segundo. El tiempo que transcurrirá entre que enviamos un mensaje y este llega al destinatario (latencia) será de un milisegundo. La 5G, es decir la quinta generación de telefonía móvil, logrará que miles de dispositivos móviles, aparatos y sensores se puedan conectar por metro cuadrado sin que ello afecte a la cobertura, como ahora aún pasa en los estadios o conciertos. En el país, Claro presentó sus primeras pruebas de 5G, en septiembre, en el marco del evento ‘Ecuador Digital’.

Ciudades realmente conectadas

La revolución irá más allá de ver a personas jugando videojuegos como Call of Duty, en sus móviles (hoy es posible solo con la conexión de casa). Algún día no muy lejano, drones podrán sustituir a los repartidores a domicilio, los semáforos tomarán decisiones de forma autónoma para dar paso a las ambulancias y hasta se desarrollarán sistemas que harán que nuestro auto logre frenar si el carro de delante lo hace.

Inteligencias en todos los servicios

La combinación de la 5G y la inteligencia artificial será una puerta de entrada, por ejemplo, a la realidad mixta (realidad virtual y realidad aumentada). Imagine caminar por la calle de una ciudad con unas gafas o unos auriculares que le digan el nombre de esa persona con la que se acaba de encontrar. Será posible (Microsoft ya trabaja en la evolución de sus HoloLens). La oportuna data aparecerá impresa sobre la realidad gracias a las gafas o será susurrada al oído. Esos mismos accesorios también aportarán información a un mecánico, el cual podrá ver gráficos del interior del motor flotando en el aire mientras repara un automóvil.

Mundos espejo

Con los equipos de realidad aumentada conectados a la velocidad de la 5G, serán posibles diversos escenarios. Entre estos que un cirujano vea -desde su consultorio en Guayaquil- una réplica en 3D de un corazón mientras alguien lo opera en la Amazonía y, servir de guía.

Otra electricidad

“En 1875, las estaciones de tren de París comenzaron a usar luces eléctricas. En 1879, una planta de energía en San Francisco comenzó a vender energía eléctrica. Estos fueron cambios históricos. Más tarde en el siglo XX, la electricidad aumentó significativamente la productividad en todas las industrias. La humanidad entró en la era eléctrica, justo cuando la era comenzó con la iluminación eléctrica... 3G y 4G resolvieron el problema de conectar a las personas. La 5G y la inteligencia artificial serán un punto de inflexión para la tecnología. Esta tecnología se aplicará aún más en todas las industrias, como la electricidad fue hace más de un siglo”, es el baticinio del principal ejecutivo de Huawei, Guo Ping.