Médica, máster en seguridad alimentaria y nutrición

Hay que saber como beberla y en que momento

Una persona puede pasar sin comer hasta dos meses, pero sin tomar agua, máximo ocho días. La doctora Reina de Rubio, médica y máster en Seguridad Alimentaria y Nutrición, hace la comparación para explicar cuán importante es este líquido en nuestras vidas.

Y lo es aunque usted piense que está en un lugar frío y que no necesita beber tanta agua. El solo hecho de estar frente a la computadora, con acondicionador de aire, lo somete a radicales libres. Eso y las luces blancas, que son los rayos ultravioletas, deshidratan su piel.

Por ello, debe beber entre seis y ocho vasos del líquido al día. Si no le gusta mucho, puede tomar cinco vasos y complementar con nutrientes como frutas, ensaladas y aguas aromáticas.

Pero, ¿por qué es tan importante ingerirlo? Entre otras cosas porque al entrar al organismo va a recoger las toxinas y a generar una apertura renal. “El riñón abre sus compuertas y bota esa basura que está de más”, explica esta profesional, quien además tiene un diplomado internacional en Medicina Estética y es propietaria del centro Nutrimed.

Precisamente en esos tratamientos en los que se busca rejuvenecimiento o bajar esas libras de más, la clave para un buen resultado está también en la cantidad del líquido que se tome.

Y es que a quien mantiene esta buena costumbre se le nota. “La persona que toma agua, así no se ponga crema, tiene una calidad de piel diferente que quien no la toma, así se ponga las cremas más famosas”, explica Reina de Rubio, capacitadora y presentadora de programas de televisión en temas de Nutrición y Estética. Se evidencia además en menos acné y en que a mucha gente se le deja de caer el cabello o se le disminuyen las ojeras.

Y en esta línea, es importante saber cuáles son los mejores momentos para tomarla y cómo hacerlo. “El problema del ser humano es que mientras come, está tomando agua y helada. El ácido clorhídrico se congela, se queda paralizado y el bolo alimenticio pasa sin que el ácido clorhídrico lo disgregue, por eso la persona que come con agua con temperaturas muy frías, a la hora tiene hambre”, dice.

La buena costumbre de tomar suficiente líquido debe inculcársela desde la niñez. De allí la importancia de enviar un termo con agua a los niños.