Desequilibrante. Alejandro Guerra es pieza clave en el conjunto venezolano.

Guerra, un ‘Lobo’ suelto en EE. UU.

Supimos aguantar el embate de los uruguayos y manejar el partido ante una selección muy dura, este grupo tiene una fe impresionante.- Alejandro Guerra, volante venezolano

Figura en el Atlético Nacional de Colombia que se clasificó a semifinales de la Copa Libertadores de América 2016, el volante Alejandro ‘Lobito’ Guerra también está demostrando toda su jerarquía en la Copa América Centenario, donde es la manija de la sorprendente selección de Venezuela, que avanzó a cuartos de final.

‘El Lobito’ Guerra, un jugador con un desparpajo típico de la escuela sudamericana, físicamente parecido al fenomenal volante español Andrés Iniesta, dio clase de fútbol el pasado jueves en la victoria de Venezuela sobre Uruguay por 1-0 en Filadelfia (este).

Y es que el triunfo conseguido por la selección que conduce Rafael Dudamel por el Grupo C del torneo continental que se celebra en Estados Unidos, es el primero en su historia sobre Uruguay por Copa América.

Además, le significó a Venezuela pasar a cuartos de final de la Copa América Centenario y enviar prematuramente a casa a la Celeste.

Dentro de una selección con muchos jugadores que brillaron, como Salomón Rondón, el autor del gol, el defensa Oswaldo Vizcarrondo, que sacó cuanto pelotazo al área lanzaron los uruguayos desesperados en busca de un cabezazo salvador, y el portero Dani Hernández, muy seguro en el juego aéreo, ‘el Lobito’ Guerra fue el punto más alto del equipo.

El mediocampista de 30 años de edad, nacido el 9 de julio de 1985 en Caracas, no solo asistió y manejó los hilos de la ofensiva vinotinto, tarea para la cual está llamado, sino que también marcó, metió pierna fuerte y corrió.

Ese sacrificio en beneficio del equipo, dejando en un segundo plano su lucimiento individual, se debe a que “desde el primer día que llegué siento una selección muy unida, compacta y cuando uno está feliz, alegre, uno trabaja tranquilo”, según señaló en Filadelfia tras el histórico compromiso contra Uruguay.