Guayaquil: sociedad, pasado y nostalgia
Guayaquil es una sociedad urbana-portuaria con diversos modos de vida -de la una y la otra-, hecha de barrios y ciudadelas, centro y periferia, de múltiples y dinámicas relaciones económicas, sociopolíticas, étnicas, culturales, religiosas, artísticas, comunicacionales, etc.
Tiene calles para recorrerla, pero quien lo hace ignora su pasado y no conoce que su hábitat es el que da y orienta los diferentes sentidos de esas serpentinas que la recorren de norte a sur, de este a oeste, del río al estero, del cerro a las entradas del Pacífico, que dice que Guayaquil es acariciada por mar y ríos.
Entre cerros, ríos y esteros se hizo urbe. Así fueron creadas, recreadas y tejidas sus diversas sociabilidades, de aquí, de allá, de los que llegan y se van. Por eso no siempre se encuentran huellas de su pasado, signos, rostros y lenguajes del ayer. Esto nos permite comprender y reconocer que Guayaquil es una sociedad de presente que no renuncia al pasado. Los guayaquileños la tienen en piel, corazón, ambiente, instituciones y hechos históricos que dicen que sus integrantes nacen y se hacen porque construyen su historia de libertad y para la libertad.
Hay un Guayaquil pasado que no está sino en las “crónicas de los periódicos de ayer que nadie lee” (Lavoe), que conservan las noticias frescas del Guayaquil de las galladas, juegos barriales, del palo encebado, vecindario y piletas, de los puentecitos de caña y madera, del fango, etc.
En ella también están las casas del sano placer: Los Negritos, Puerta de Fierro, Corozo, Bugaloo, Casa de las Muñecas, Bar Anita, y el recordado Capitán. Ahí muchas veces JJ y los bohemios hacían filosofía de la vida entre bielas, bromas, canciones, ritmos y placeres fugaces. Por eso cuando recorro los barrios de ayer, Puerto Lisa y otros, siento nostalgia de ese ayer que quisiera conservar.
Aún recorro calles y esquinas del suburbio y sectores marginales que construimos los de ayer. Ahí fuimos niños y jóvenes que recuerdan los nombres de los vecinos, del tendero, tamalero y heladero, las empanadas y chiricanos, etc., que son presente de memoria y nostalgia.
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