Algarabía. La plantilla del elenco cetáceo celebró la obtención de la primera etapa en un bus, mientras los aficionados manabitas los aplaudían y seguían en autos, bicicletas o caminando, todo para festejar el logro.

Una fusion de jubilo

El ídolo de Manta se quedó con la etapa del campeonato ecuatoriano. Tumbó a grandes y, a una fecha del final, puede marcar un precedente: sellar una etapa en este nuevo formato como el único invicto del torneo.

La gente no podía creerlo, digerirlo; el ídolo de Manta se quedó con la etapa del campeonato ecuatoriano. Tumbó a grandes y, a una fecha del final, puede marcar un precedente: sellar una etapa en este nuevo formato como el único invicto del torneo. Su gente hizo del festejo una celebración completa.

“Estoy muy orgulloso de estos jugadores, muchos pensaban que se iban a caer, pero demostraron que tienen mucho ímpetu y corazón. Ponen a Manabí en lo más alto del fútbol ecuatoriano”, manifestó Salvador Mejía, quien es panadero e hincha del representativo cetáceo desde sus inicios.

Para la gente en Manta, el final del compromiso solo fue el inicio de la caravana que partió desde el estadio en dos buses: uno netamente de jugadores, directivos y en el otro familiares y demás personas de la institución.

Los jugadores, uno a uno, fueron arribando al bus y eran aplaudidos, hasta que le tocó subir a Ordóñez. Cuando la ‘Tuca’ estaba por ingresar, un sólido cántico de “Tuca, Tuca, Tuca” hizo que se le dibujará una sonrisa al delantero, quien fue figura del cotejo de ayer.

Ya con los protagonistas embarcados, el colectivo recorrió la conocida “vía al aeropuerto”, una avenida larga que se llenó de carros y banderas alusivas al club ganador de la primera etapa, hasta llegar a la Plaza Cívica, donde se extendió la celebración.

Jorge Mile junto a su hijo Nicolás, de 9 años, se unió a la larga cola de autos y explicó a Diario EXPRESO la alegría que siente luego de ver que este equipo logró un hecho inédito para Manabí.

“El año pasado la sufrimos mucho, este equipo y nuestra provincia; en la actualidad, al ver que alcanzan esto, da más gana de apoyarlos. Traje a mi hijo para que vea a este equipo que es muy luchador. Hoy todos somos Manabí”.

“Olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé, cada día te quiero más, soy delfinista es un sentimiento, no puedo parar”, era la banda sonora del líder de la etapa, que era armonizada por platillos, ollas rotas y bocinas.

Durante el paseo y llegada a la plaza, los futbolistas agradecieron a sus hinchas, unos lanzaron camisetas, otros saltaban y se tomaban ‘selfies’. Todos querían registrar este inigualable momento.

El fútbol ecuatoriano adhiere una página en su historia, y con tinta manabita. Delfín le dio una fiesta a su gente y ellos no defraudaron. El corazón de Manabí hoy más que nunca es azul y amarillo.

SDP

PARA SABER

Cábala

El hincha cetáceo Alfredo López exhibió en la caravana un perro de peluche. “Esta es la cábala del perro muerto y como no se puede llevar uno verdadero, su remplazo es uno de peluche”, dijo.

Alegoría

Carlos Chinga, de Chone, llevó más de 400 globos y los repartió a todos los niños que asistieron a ver el cotejo.

Incidentes

Antes del partido, presuntos integrantes de la barra de Liga de Quito que no pudieron ingresar al Jocay, porque se encontraban en estado de ebriedad, se enfrentaron, según un agente policial, presuntamente a integrantes de la Sur Oscura.