Tiene forma de pera o de manzana Conozca sus riesgos
La acumulación de grasa en determinadas partes del cuerpo hace que aumenten las posibilidades de padecer problemas cardíacos.
Si es mujer y está en la posmenopausia, la forma de su cuerpo puede decir mucho sobre los riesgos de sufrir problemas cardíacos.
Un estudio publicado en European Heart Journal analizó la relación que existe entre la grasa que se acumula en determinadas zonas donde haya probabilidades de padecer problemas cardiovasculares.
Los resultados muestran que no es lo mismo tener un cuerpo de manzana que de pera. Si su forma es de manzana, es decir que concentra la grasa en la parte media o tronco, tienen casi el doble de riesgo de problemas cardíacos y accidentes cerebrovasculares que si su silueta es de pera (almacena más grasa en las piernas).
La Facultad de Medicina Albert Einstein, Nueva York (EE. UU.) lideró este trabajo y concluyó que no basta saber cuál es nuestro peso para medir el riesgo que tenemos, pues más importante que los números que nos muestra la báscula es conocer dónde está distribuida esa grasa.
El siguiente paso del estudio será evaluar cuáles son los hábitos alimenticios que hacen que esos rollitos se concentren en ciertas áreas.