Polémica. El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva está envuelto en un caso de corrupción en su país.

La Fiscalia acusa a Lula da Silva de lavado y ocultacion

La Fiscalía de Sao Paulo acusó ayer al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva de ocultación de patrimonio y lavado de dinero, supuestamente por haber recibido un apartamento de una constructora implicada en el caso de corrupción en Petrobras,

La Fiscalía de Sao Paulo acusó ayer al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva de ocultación de patrimonio y lavado de dinero, supuestamente por haber recibido un apartamento de una constructora implicada en el caso de corrupción en Petrobras, dijeron medios locales.

Lula fue interrogado el pasado viernes por orden de la Fiscalía Federal de Paraná en otro proceso relacionado con la investigación por corrupción en Petrobras.

En la denuncia presentada ayer, según varios medios locales, el fiscal acusó a Lula de ocultar que es dueño de un apartamento de lujo en la localidad de Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, que está a nombre de la constructora OAS, una de las investigadas en el caso Petrobras.

Lula ha negado en reiteradas ocasiones ser dueño de ese apartamento, así como de una finca rural en el municipio de Atibaia, también en Sao Paulo, que también está bajo investigación de la Fiscalía de Paraná.

La Fiscalía de Paraná, que ha centralizado las investigaciones del caso Petrobras, apunta que esas propiedades podrían estar relacionadas con el caso de corrupción en la petrolera y habrían sido usadas por las constructoras para disfrazar el pago de coimas.

La defensa de Lula solicitó al Tribunal Supremo que se pronuncie sobre el posible conflicto de competencias que, a su juicio, supone que dos cortes diferentes investiguen “los mismos hechos”.

Mientras, el juez que investiga la red de corrupción en la petrolera estatal Petrobras autorizó ayer a los defensores del expresidente brasileño a acceder a los dos procesos abiertos contra el exmandatario y que estaban protegidos por el sigilo judicial.

La autorización figura en una decisión divulgada por el titular del decimotercer juzgado federal de la ciudad de Curitiba, Sergio Moro, en respuesta a una petición de los abogados de Lula para que el juez revele en cuántos procesos el exjefe de Estado figura como investigado y en cuántos es solamente citado.

En su decisión, el juez alega que hasta la semana pasada era necesario mantener el sigilo de los procesos para facilitar los trabajos de la policía en la búsqueda de pruebas.

El objetivo del secreto, explicó, fue “evitar riesgos (de ocultación) de las pruebas y garantizar el trabajo de los equipos policiales” que investigan al dirigente del Partido de los Trabajadores por ocultación de patrimonio, blanqueo de dinero y enriquecimiento ilícito.

Para Moro, el sigilo ya no se justifica tras la operación del viernes pasado en que la policía condujo a Lula a declarar en una comisaría y en la que recogió diversos documentos y objetos en allanamientos realizados en la residencia del exmandatario, en la sede del instituto que dirige y en oficinas y viviendas de algunos de sus familiares y allegados.