Con experiencia mundialista
La Tricolor sub-20 tendrá una difícil tarea en el inicio de 2017. Desde el 18 de enero será el local del torneo sudamericano de la categoría, que entregará cuatro cupos para el Mundial de Corea.
La Tricolor sub-20 tendrá una difícil tarea en el inicio de 2017. Desde el 18 de enero será el local del torneo sudamericano de la categoría, que entregará cuatro cupos para el Mundial de Corea.
Por esa razón, el entrenador Xavier Rodríguez planificó todo un año de microciclos, tanto en Guayaquil como en Quito. Ayer se cumplió el último. Fue con 25 futbolistas, en la Casa de la Selección.
Desde la próxima semana trabajarán los 23 definitivos y es posible que se concentren directamente en Riobamba, donde armarán su centro de operaciones. Eso se lo resolverá durante esta semana.
La nómina de esta selección tiene experiencia. Trece de ellos disputaron el Mundial sub-17 en 2015. Ese combinado se ubicó entre los ocho mejores del planeta. Quedó eliminado en los cuartos de final ante México, tras perder 0-2.
Antes de ese Mundial de 2015, esta selección fue golpeada por el escándalo de los pasados de edad. Por esa razón, todos los jugadores que ahora están en la Tricolor se sometieron a varios procesos de verificación de la edad. Se comprobaron sus documentos con el Registro Civil y hasta se hicieron pruebas como el carpograma (determina la edad ósea).
Además de la experiencia mundialista de la base, otros jugadores hicieron su camino en la primera división del fútbol ecuatoriano, como Luis Segovia (31 partidos con El Nacional en 2016), Adolfo Muñoz (19 juegos con El Nacional) y Joao Rojas (39 partidos en Aucas).
A ellos se suman cuatro jugadores que están en el exterior. El arquero Gabriel Carabalí (Colo Colo de Chile), Willian Vargas (Boca Juniors de Argentina), Pervis Estupiñán (Granada de España) y Bryan Cabezas (Atalanta de Italia).
De ellos, la principal figura es Cabezas. Él fue titular en el Independiente del Valle que llegó a la final de la Libertadores.