Imagen referencial. Los gobiernos provinciales tuvieron el rubro más ajustado.

Entre enero y agosto, las prefecturas bajaron sus compras en 41,7 %

Según Sercop, este año las adjudicaciones de las prefecturas sumaron 213,2 millones de dólares.

El cambio de autoridades tuvo efectos económicos. Los municipios, prefecturas, juntas parroquiales y sus empresas públicas redujeron sus compras públicas tras las elecciones de marzo de este año. La caída, comparando datos con 2018, es del 14 %.

Entre enero y agosto de este año, todos los gobiernos autónomos descentralizados y sus empresas hicieron compras por 1.510,5 millones de dólares. En el mismo periodo, pero de 2018, la cifra llegó a 1.755,9 millones.

Todos bajaron sus estimados. Los gobiernos provinciales, sin embargo, tuvieron el rubro más ajustado. La diferencia es de -41,7 %.

Según el Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop), en este año las adjudicaciones de las prefecturas sumaron 213,2 millones de dólares. En 2018 fueron 365,8 millones de dólares.

Los municipios, por su parte, tuvieron un recorte menor. De 1.074 millones de dólares, en 2018, bajaron a 1.050,8 millones. Solo un 2,2 % de disminución de adquisiciones de bienes y servicios.

Las Juntas Parroquiales Rurales tuvieron también un recorte mínimo. Menos de 200.000 dólares de ajuste.

Incluso en las empresas públicas de los gobiernos seccionales hubo reducciones después de las elecciones de autoridades a escala nacional. De 270,9 millones de dólares se contrajo a 201,6 millones de dólares. Una caída de 25,6 %.

La mayoría de contratos adjudicados tienen relación con obras físicas para uso de los ciudadanos. En el Municipio de Durán, por ejemplo, se adjudicaron 39,8 millones de dólares para el servicio de “barrido y limpieza de calles, recolección, transporte y descarga de desechos sólidos no peligrosos en el relleno sanitario de la ciudad de Durán”.

La Prefectura de Pastaza también está entre las principales contratantes del año con la firma de un acuerdo para la “construcción de hangares en la parroquia Fátima, del cantón Pastaza”. Por ese servicio se pagaron más de 9,6 millones de dólares.

En total, el Estado —incluido gobierno central, cortes y GAD— adjudicaron 4.044 millones por compra pública.

El dato más alto es, sin embargo, el contrato que aún no es firmado por el Municipio de Guayaquil para la recolección de basura. Por eso se acordó desembolsar 402,1 millones de dólares, pero el acuerdo está parado.