Fe. Las asistentes pidieron por el bienestar de sus futuros vástagos.

Una emotiva misa reunio a 70 embarazadas

En la parroquia San Antonio María Claret, las actividades parroquiales del 2016 culminaron con una emotiva liturgia.

En la parroquia San Antonio María Claret, las actividades parroquiales del 2016 culminaron con una emotiva liturgia.

La ceremonia empezó a las 18:30 y en ella participaron cerca de setenta futuras mamás, quienes acudieron hasta el lugar para consagrar a sus bebés a la Virgen María.

La actividad, organizada por la Casa de la Vida, agrupación católica provida de la urbe, se lleva a cabo en esta parroquia desde mediados de 2007.

Sin embargo, septiembre, conocido como el Mes de María, y diciembre son algunos de los meses en los que mayor número de madres acuden.

Antes del inicio de la misa, las asistentes depositaron papeles con los nombres de sus futuros hijos a los pies de la Virgen de la Buena Esperanza, conocida como la protectora de las mujeres embarazadas.

Tras la liturgia estas recibieron una bendición especial en la que pudieron acercarse de manera individual al altar.

Milna de la Cruz, miembro de la Casa de la Vida, indicó que esta ceremonia busca acercar a los creyentes a la madre de Dios, pero también transmitir los preceptos de la inviolabilidad de la vida, precepto que la agrupación defiende.

A la liturgia también acudieron mujeres que están en busca de concebir, así como madres primerizas que pidieron una bendición para sus hijos.

Las ceremonias de consagración continuarán en 2017. Estas se llevan a cabo los últimos martes de cada mes. Una hora antes de la misa se ofrecen charlas bíblicas enfocadas en el tema de la maternidad.