
La educacion virtual es una alternativa para la universidad
La Senescyt estableció que el programa de educación superior virtual se impartirá a partir del primer período académico de 2019.
La demanda es más alta que la oferta. Alrededor de 100.000 bachilleres no pueden ingresar a la universidad anualmente de los cerca de 200.000 que se gradúan. Realidad que desde la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt) se busca solucionar. Se han planteado varias alternativas. La última es el lanzamiento del programa de educación superior virtual, por la cual se ofertan 30.000 nuevos cupos en instituciones de educación superior pública.
El secretario de Educación Superior, Augusto Barrera, señaló que el programa surge de un trabajo conjunto con las universidades públicas del país, y que estará a disposición de toda la población ecuatoriana, “especialmente de los adultos y jóvenes que tuvieron que dejar sus estudios o no pueden combinar actualmente la educación presencial con sus actividades laborales”. Explicó que estos nuevos cupos serán ofertados en una tercera postulación que se llevará a cabo a finales de junio del 2018. “Los interesados pueden postular con su puntaje vigente; es decir, sin dar un nuevo examen Ser Bachiller”.
En el programa participan cinco universidades públicas del país: Central del Ecuador; Técnica del Norte; Estatal de Milagro; Técnica de Manabí y la Escuela Superior Politécnica del Ejército.
Entre tanto, las carreras ofertadas serán Trabajo Social, Educación Básica, Software, Derecho, Psicología, Educación Inicial, Turismo, Economía, Pedagogía de los Idiomas, Comunicación Social, Administración, Administración Pública, Educación Intercultural Bilingüe, Contabilidad y Auditoría.
¿Es un nuevo experimento o una solución? Actores de la educación en el país que hablaron con EXPRESO, consideran que esta es una propuesta muy válida que ayudará a que los bachilleres lleguen a la educación superior. Incluso criticaron el hecho de que durante el anterior Gobierno, esta forma de educación fue devaluada y casi desapareció. “Es muy interesante que el Gobierno y la Senescyt reconozcan, lo que negaron anteriormente las autoridades del correato, que fue la descalificación a todo lo que era la educación virtual. De una manera irresponsable, en el sentido de no reconocer que en las actuales circunstancias del desarrollo de la informática los espacios de educación se han ampliado”, dijo a este medio Víctor Luna, del Contrato Social para la Educación.
A sus ojos, el tema no debería quedarse únicamente en los estudios para tercer nivel, sino de trabajar con miras a que el programa abarque también el cuarto nivel en la educación superior. Cree que es conveniente que las autoridades analicen esta posibilidad, que a criterio de Luna permitiría a muchos ya profesionales seguir sus carreras mientras trabajan.
Fernando Sempértegui, rector de la Universidad Central del Ecuador (UCE), aseguró a este medio que el programa es una oportunidad cierta para incrementar la oferta y permitir que más bachilleres lleguen a la universidad. A su criterio, la modalidad presencial es difícil para muchos ecuatorianos por factores de tiempo. Precisó que en el caso de la Universidad Central, al momento en este sistema online están abiertas las carreras de Administración de Empresas, Psicología, Turismo, y las ramas de Contabilidad. Espera para el próximo semestre establecer las carreras de Nutrición, Salud Pública y Epidemiología. “La Universidad Central ha construido una plataforma tecnológica muy avanzada y tiene experiencia con algunas carreras que funcionaban online. Ahora nosotros estamos comprometidos en ampliar la oferta de carreras para que los bachilleres puedan tener acceso a la educación superior”, señaló.
Para Andrés Quishpe, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE), esta es una oportunidad; sin embargo, cree que el Gobierno y las autoridades de Educación deben profundizar en el tema de la educación presencial. Ellos le tomaron la palabra al presidente Lenin Moreno, sobre la creación de 40 universidades a escala nacional.
“La educación a distancia es un elemento positivo. Pero los 30.000 cupos no van a cubrir la demanda de los miles de jóvenes que se quedaron fuera de las universidades. La Senescyt ha dado un dato, que el 27 % que postuló al último examen Ser Bachiller son jóvenes entre 18 y 26 años de edad, lo que significa que es toda una generación de jóvenes que fueron excluidos por el correísmo”, aseguró.
No son los únicos que ven como positiva esta posibilidad. Rubén López, de 31 años, quien trabaja como mensajero en una empresa privada, considera que al abrirse la educación virtual en universidades públicas le permitirá seguir la carrera de Administración de Empresas. A sus ojos, que esta oferta esté en las instituciones públicas abaratará costos. “Este sistema solo lo tenían las particulares y era muy costoso”, aseguró.
Un criterio similar tiene Carolina Sánchez, de 21 años. Ella por tres ocasiones dio la prueba para ingresar a la universidad para seguir Psicología sin conseguir un cupo. “Creo que es una oportunidad para estudiar, pero se debería ampliar la oferta de cupos en el sistema presencial”, afirmó.
Cambios
Elevarla a tercer nivel
Parte de las acciones para solucionar el problema del ingreso a la educación superior está volver más atractivas las carreras técnicas y tecnológicas.
Lo primero ha sido plantear ante la Asamblea una reforma a la Ley de Educación Superior, en la que se reconoce a esta educación como de tercer nivel. Se espera que hasta mediados de año esté vigente.
A la par, la Senescyt presentó un plan para la construcción de 44 nuevos institutos destinados para ese fin.