Una mejoría inmediata. En las cifras, el mercado laboral ecuatoriano tuvo una recuperación denominada por los economistas en forma de ‘V’, es decir, una profunda caída, debido al confinamiento por la pandemia de COVID-19, seguida por un restablecimiento casi inmediato de las plazas de trabajo.

Eso se interpreta de los resultados de septiembre de 2020 de la Encuesta Nacional Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu), que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) presentó este 15 de octubre de 2020.

Según los datos del INEC, al cierre de septiembre de 2020 el desempleo se ubicó en 6,6 %, es decir, hubo una caída de 6,7 puntos porcentuales respecto al dato de mayo-junio: 13,3 %, la última cifra que publicó la entidad. En ese entonces el número de desempleados superó el millón.

¿Qué implica una reducción de 6,7 puntos porcentuales? Que unas 486.962 personas volvieron a tener empleo. Sectores como agricultura y ganadería, comercio, construcción, desarrollo de software, entre otros, fueron los que más ayudaron a recuperar plazas de empleo, aseguró el ministro de Trabajo, Andrés Isch.

En esa misma línea, la tasa de empleo adecuado pleno (que se refiere a las personas que ganan al menos el salario mínimo y trabajan la jornada legal de 40 horas a la semana; o que trabajan menos horas porque no quieren trabajar más) pasó de 16,7 % en mayo-junio a 32,1 % al cierre de septiembre. Es decir, pasaron de 1,2 millones en mayo-junio a 2,5 millones en septiembre.

¿Cuál es la razón para la mejoría en las cifras de empleo? Según Isch, las nuevas modalidades de contratos ayudaron a mejorar la situación laboral y permitieron una recuperación más rápida. No obstante, la informalidad se ha incrementado. Para septiembre de 2020, el 48,6 % de las personas con empleo se encuentran en el sector informal de la economía. En septiembre del año pasado la cifra llegaba a 46,7 %.

Pese a las explicaciones del Gobierno, la pregunta se mantiene: ¿el mercado laboral ecuatoriano pudo recuperarse tan rápido? Para Víctor Hugo Albán, vicepresidente del Colegio de Economistas de Pichincha, las cifras del INEC no son reales ni consistentes.

Una de los argumentos, según Albán, es que la inversión todavía no se ha recuperado en el país y ese es uno de los indicadores que van de la mano con la generación de trabajo.

“¿De dónde va a aparecer el empleo milagrosamente? (...)¿Dónde están esos 500.000 empleos nuevos?”, dijo Albán.

Según las estadísticas del Colegio de Economistas de Pichincha, el nivel de desempleados se mantiene en 900.000 a escala nacional y esa cifra todavía no ha presentado una mejoría en los últimos meses.

Otro de los cuestionamientos tiene que ver con la metodología. Desde varios gremios se ha señalado que las cifras de mayo-junio del INECse levantaron vía telefónica, por lo que no es posible compararlas con los resultados publicados ayer, que fueron obtenidos por encuestas presenciales.

La Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes) aseguró este jueves que si la comparación se la hace frente a las cifras de septiembre de 2019 (antes de la pandemia), se observará también un deterioro importante, que refleja la magnitud de la crisis económica que aún vive el país.

La encuesta 

• Muestra: Según el INEC, el 98,9 % de las entrevistas de la Encuesta Nacional Empleo, Desempleo y Subempleo (Enemdu) se realizó de manera presencial, a diferencia de mayo-junio de este año, que se realizaron vía telefónica. 
• Cambios: El INECconsultó a 9.058 viviendas en cinco ciudades del país. La encuesta constaba de 103 preguntas. Guayaquil fue la ciudad en la que más hogares se consultó:1.428. La segunda ciudad en donde se realizaron más encuestas fue Cuenca:896. 
• Modalidad: El INECestá en un proceso de cambio de metodología de la Enemdu. Se prevé que desde enero de 2021 le entrega de cifras de empleo se efectúe de manera mensual. Además, se incorporarán más datos.