Recibimiento. Diego Milito ingresa al ‘Cilindro’ de Avellaneda donde sus lágrimas de alegría y nostalgia fueron incontenibles.

Diego Milito, de principe a rey

No era para menos, se iba el que llegó como príncipe y se alzó para ser rey de Racing Club de Avellaneda: Diego Milito. El gaucho dejó en 2003 al club de sus amores y luego de 13 años se despidió del fútbol en ese lugar especial, el ‘Cilindro’ de Avell

No era para menos, se iba el que llegó como príncipe y se alzó para ser rey de Racing Club de Avellaneda: Diego Milito. El gaucho dejó en 2003 al club de sus amores y luego de 13 años se despidió del fútbol en ese lugar especial, el ‘Cilindro’ de Avellaneda. Su casa.

Milito, que se consagró campeón con Racing en dos ocasiones (2001 y 2014), compartió una jornada especial con varios excompañeros de equipo, entre ellos el arquero italiano Francesco Toldo, Javier Zanetti, Walter Samuel y los colombianos Alexander Viveros e Iván Córdoba.

El partido enfrentó, en el primer tiempo, a los campeones de 2001 ante los Amigos de Milito. Mientras que en el complemento, Milito pasó a jugar para los campeones de 2001, que esta vez se unieron a los de 2014.

“El Príncipe” se dio el gusto de jugar los últimos minutos con su hijo Diego Leandro Milito, que actúa en las divisiones juveniles de Racing, y le hizo un gol de penal a Toldo. Al final, la pantalla gigante proyectó los mejores momentos de la carrera de Milito.

“Se me acaban las palabras. Me voy del Cilindro con el sueño consumado y con esta camiseta. Muchas gracias a mi querido Racing Club y a todos ustedes que son únicos”, cerró.