
Un desfile de la Mama Negra para venerar a la Virgen
Dos días de devoción a la patrona del volcán Cotopaxi. Una de las fiestas del personaje se celebra el 23 y 24 de septiembre.
La fiesta religiosa es en honor a la Virgen de La Merced, considerada la patrona del volcán Cotopaxi, de las Fuerzas Armadas y de los comerciantes de los mercados de Latacunga.
Al unísono se lleva a cabo la cabalgata de la Mama Negra de septiembre, cuya diferencia con respecto a la fiesta de noviembre es que se utilizan máscaras en vez de pintarse el rostro.
Quienes organizan la fiesta en honor a la Virgen son los integrantes de la Asociación de Devotos y Donantes, quienes se preparan con un año de antelación para celebrar a la patrona.
Según Guillermo Garzón, presidente de la asociación, en septiembre nace la tradición de la Mama Negra, cuyo significado es religioso por ser la fecha en honor a María.
Por su parte Byron Gómez, conocedor de la historia de esta celebración, dijo que “la verdadera fiesta de la Mama Negra se realiza en septiembre, su sentido es religioso porque se recuerda la intervención de la Virgen durante la erupción del volcán Cotopaxi en 1742, que evitó una desgracia. Desde entonces las vivanderas (comerciantes), “devotos y donantes de los mercados de La Merced y de El Salto se organizan para rendirle tributo cada año con misas y pregones”, acotó el investigador.
La celebración se prepara con un año de antelación. Son más de tres mil personas las que participan en los dos días de cabalgata. Cada delegación va acompañada de una banda, comparsa y la ashanga, que es la comida u ofrenda.
María Díaz, integrante de la asociación, indicó que ella ofrendó una banda de las 48 que participaron, ashanga y la comparsa que incluye a personajes como los loeros, quienes cantan versos en honor a la Virgen. “Virgencita de La Merced, Virgencita del volcán, tú que nos diste la vida, líbranos de todo mal y riéganos las bendiciones a todos los devotos, al Ecuador y extranjeros que te aman con devoción”, fue una de las loas que se escucharon durante el recorrido.
El encargado de recitarla fue Patricio Molina, quien tiene 19 años en la tradición y es uno de los ocho ‘negros loeros’ o acompañantes que van junto a la Señorona, que es como identifican a la Mama Negra, que rinde tributo a la patrona de todos los latacungueños, la Virgen de La Merced. Frente a la iglesia y con la imagen de la efigie, danzaban al son de la banda y los versos.
Jorge Carrillo, otro de los que participan como ‘negros loeros’, asegura que muchos copian los versos, pero él prefiere componerlos en sus ratos de descanso. Este personaje es el que da el toque pintoresco a toda la delegación. Con cada estrofa, que lleva un matiz de picardía, crea el ambiente de humor en el anuncio del paso de la Mama Negra.
Llevan coloridos trajes, el rostro pintado de negro, una botella de licor de diversos colores y no paran de recitar las loas. En los dos días de fiesta se realizan misas, procesiones y peregrinaciones con la imagen. Byron Gómez comentó que han pasado más de 200 años de aquella erupción y unos cien de la primera fiesta.
El festejo finaliza con la misa campal, en la que los devotos llevan una parte de sus cosechas para ofrecerla a la imagen. Un grupo de mujeres, usando canastas y sacos, portaban pétalos de rosas con los que ‘bañaban’ a la imagen de madera que fue paseada por el centro de Latacunga.
Danzantes
Es una tradición que se hereda
1. Folclor. La fiesta se realiza en homenaje a la Santísima Virgen de La Merced, por dos días. El vestuario es muy llamativo para esta presentación. Las mujeres portan canastos y sacos con pétalos de rosas, con los que ‘bañan’ a la imagen de madera. 2. Figura. El personaje de la Mama Negra y su inseparable muñeca Baltazara llevan coloridos atuendos en el desfile.
El párroco Washington Salvador bendijo a los fieles que acudieron para ser parte de la actividad. La misa dura dos horas y luego viene la procesión del último día de fiesta. El Rey Moro, el Capitán, el Abanderado, el Embajador y el Ángel de la Estrella son los cinco personajes principales de la comparsa. “Esta tradición se hereda”, dijo Patricio Molina, quien representa a la Santísima Tragedia. Agregó que la fiesta en honor a la Virgen de La Merced es una forma de agradecer con cantos y danzas a la patrona.