Judith vive en un departamento en el centro de Guayaquil. Ella, que prefiere no dar su apellido, tenía la intención hace un año de comprar una casa de una planta en vía a la costa; sin embargo, la “inseguridad económica” que atraviesa el país la hizo desistir.

El temor ha provocado que exista una baja demanda en el negocio inmobiliario y que muchos interesados en un proyecto retiren su dinero por la unidad reservada (casa o villa). Así lo manifiestan los empresarios de uno de los sectores fundamentales para la economía nacional que lleva dos años afrontando estrecheces. Y que, con el regreso a la Asamblea del proyecto de ley de plusvalías (ver página 3), sigue viendo un horizonte complicado.

Eduardo Morales, gerente general de ventas de la constructora Salcedo Internacional, manifiesta a EXPRESO que es la incertidumbre política y el desempleo lo que ha provocado desconfianza en el comprador.

“Hemos tenido un impacto negativo en el corte final de ventas de octubre. Cayeron un 32 %, comparado con el mismo mes del 2015. Esto, sin contar aquellos clientes que a pesar de haber reservado ya su casa, han solicitado este año la devolución de su dinero por un temor en el ámbito laboral”. O, como pasa con algunas construcciones, porque no quedan conformes con el acabado de la obra.

Jaime Rumbea, presidente de la Asociación de Promotores de Vivienda e Inmobiliario del Ecuador (Apive), señala que muchos proyectos y construcciones se interrumpieron por falta de inversión. “Se construye menos porque menos hogares demandan vivienda. Se contrata menos y en ciertos casos, pueden fragilizar proyectos”.

Las estadísticas de Apive muestran que de enero a septiembre las reservas se redujeron en un 48 % con respecto al mismo período de 2015. Incluso, pese a que los precios no aumentaron. “El incremento este año debe de ser más bajo que otros años e incluso debe haber zonas donde no exista aumento sino decrecimiento”.

No obstante, Rumbea reconoce que el financiamiento de los bancos ha continuado y está disponible para los que quieran comprar. “El año pasado hubo inconvenientes por un ‘frenón’ en el financiamiento de la banca privada al sector de la construcción. Este año el financiamiento necesario para clientes continúa”.

Pero los constructores tienen otra impresión. Dicen que la banca ha aumentado sus exigencias a la hora de dar crédito al comprador y se ha debilitado la venta. “La banca juega un papel fundamental. Hasta inicios de año los bancos estaban abiertos a dar crédito. Sin embargo, se sintió el impacto de la incertidumbre de perder el empleo y la banca comenzó a restringirlos. Algo totalmente atípico”, lamenta Morales.

Estadísticas del sector

Unidades reservadas brutas se redujeron en un 36 %, mientras las resciliaciones en un 2 %.

Crédito de Vivienda (IFIS) se redujo en un 16 % hasta el mes de septiembre en comparación con el 2015.

Empleo adecuado. Para el mes de septiembre la cifra fue de 8,8 % (57.320 personas).

Precio por metro cuadrado. No existe un dato exacto, cambia según la zona.

9,5 millones fue el crédito IFIS otorgado a viviendas de interés público en septiembre.

Voces

Jaime Rumbea

Director Ejecutivo de la Asociación de Promotores Inmobiliarios (Apive)

“Las estadísticas fuerzan a la baja. Se construye menos porque menos hogares demandan vivienda. Se contrata menos. En ciertos casos, se pueden fragilizar proyectos”.

Eduardo Morales

Gerente de Ventas y Marketing de Salcedo Internacional

“Hay que entender que la contracción del negocio inmobiliario no se ve afectado por la falta de dinero sino por la incertidumbre laboral. Las personas que compran tienen miedo por sus empleos”.

Datos

Construcción

El volumen de construcción subió este año recién en el mes de octubre 1,3 %, según la encuesta mensual de opinión empresarial del Banco Central.

Insumos

El costo de insumos para el sector de la construcción tuvo un ligero aumento en el mes de octubre de 0,9 %, y se prevé que esa cifra aumente 0,2 % en noviembre.

Negocio

La situación del negocio para el mes de septiembre se encontraba dividida. Para el mes de octubre un 17 % de empresas manifestaron sentirse mal, y se prevé que noviembre mejore en un 12 %.