Proceder. Luis Enrique se caracteriza por tomarse el tiempo antes de decidir sus renovaciones contractuales.

El tiempo corre para Luis Enrique

El tiempo es oro, al parecer la directiva del Barcelona comparte ese conocido refrán, esto luego de que ha trascendido que le ha puesto como plazo al entrenador Luis Enrique hasta marzo para que esté expreso su deseo de continuar o no al frente del rep

El tiempo es oro, al parecer la directiva del Barcelona comparte ese conocido refrán, esto luego de que ha trascendido que le ha puesto como plazo al entrenador Luis Enrique hasta marzo para que esté expreso su deseo de continuar o no al frente del representativo catalán.

El rotativo español diario Sport indica en su primera página que si antes de que acabe el primer trimestre del año 2017 no hay una respuesta del técnico actual, el presidente Josep María Bartomeu y sus hombres de confianza en la parcela deportiva, con Robert Fernández a la cabeza, comenzarán a buscar un sustituto, además de comentar que hay confianza en el estratega, pero que no se puede “hipotecar” el futuro.

Luis Enrique, cuyo contrato termina el próximo 30 de junio, aún acumula un crédito considerable por todo lo que ha conseguido en dos temporadas y media en el banquillo del Camp Nou y por todo lo que todavía puede lograr en la presente campaña.

Mientras tanto, y de manera extraoficial, los dirigentes del Barça ya bajan nombres para encontrarle sucesor en el banquillo el asturiano en caso su respuesta sea negativa.

Por otra parte, Mundo Deportivo publica que los blaugranas esperarán al exjugador, aunque “les gustaría saber la respuesta de Luis Enrique con tiempo”.

El porvenir de Luis Enrique responderá a lo que le apetezca, a lo que sienta él, pero también está asociado, es evidente, a las personas que trabajan con él en el día a día y que dependen de sus decisiones deportivas. Sus colaboradores más cercanos serán los primeros en enterarse. Mientras, jugadores implicados y posibles sustitutos también están atentos a lo que suceda.