
El contrabando de hormiga versus el control de perchas
Estas estrategias son ampliamente conocidas por las autoridades, sin embargo no se logra frenar al 100 % estas actividades ilegales.
En el Ecuador existen alrededor de 120.000 talleres artesanales que dan trabajo directa e indirectamente a 2’400.000 personas. Este es uno de los sectores afectados por el contrabando que ingresa al país. En especial de quienes elaboran textiles y zapatos.
Por los pasos fronterizos no oficiales se pasan miles de productos y a ello se suma la estrategia de hormiga, que consiste en pasar pequeñas cantidades de mercadería.
Estas estrategias son ampliamente conocidas por las autoridades, sin embargo no se logra frenar al 100 % estas actividades ilegales.
La mercadería de una u otra forma ingresa al país y prueba de ello es que cuando hacen controles en el comercio siempre deben aprehender, por falta de documentos que demuestren que se han pagado todos los impuestos que la ley exige.
En el último control realizado en Guayaquil se aprendieron 1.196 pares de zapatos, valorados en más de 19.000 dólares.
Este calzado no contaba con las normas de etiquetado INEN, lo que demostraba que son de origen extranjero y que fueron ingresados de contrabando.
En lo que va del 2019, la Aduana en Ecuador registra 20 millones de dólares en aprehensiones de mercancías, esto es, un 25 % más que en el mismo período del 2018.
La Aduana tiene planificado seguir con los controles en perchas, porque la mercadería siempre encuentra la manera de cruzar las fronteras del norte y del sur. De conformidad con el último estudio del Banco Interamericano de Desarrollo, existen más de 48 pasos no habilitados en las fronteras con Colombia y Perú.