Mas conflictos, ahora en Yemen

Cuando considerábamos que en pleno siglo XXI, en el que la ciencia ha avanzado tanto, los políticos habían comprendido que era necesario que el mundo viva en paz, que se respetarían los derechos humanos, que se imponía como sistema de gobierno la democracia y que las fábricas de armamento se convertirían en constructoras de tractores y sistemas para uso agrícola para desterrar el hambre de la humanidad, resulta que todo esto se ha convertido en vana ilusión. Frente a los excesos de producción de alimentos en ciertos países, en otros la gente se muere de hambre. Tienen que emigrar para buscar refugio frente a la ferocidad de ciertos gobernantes a quienes solo les interesa defender sus privilegios. Las Naciones Unidas y los organismos internacionales que se crean todos los días son un verdadero fracaso y hay que buscar la ayuda de las grandes potencias, como Estados Unidos y China, para que intervengan a fin de hallar la solución menos dolorosa.

Teniendo muy cerca a Venezuela, a la que miramos con cierta indiferencia cómplice, llamará la atención que me refiera sobre Yemen por los problemas que está sufriendo, porque no podemos ignorar que por lo menos 130 niños mueren cada día por hambre, enfermedad y por el bloqueo de los puertos yemeníes impuesto por Arabia Saudita, que impide la llegada de alimentos, a tal punto que la ONU ha calificado esta situación como “la peor crisis humanitaria del mundo”.

Hablemos sobre Yemen: Es un país bicontinental situado en Oriente Próximo y en África. Su parte asiática está situada al sur de la península de Arabia, rodeada por el mar Arábigo, el golfo de Adén y el mar Rojo, en Asia. Comparte fronteras con Omán y Arabia Saudita. Es el único Estado republicano en la península Arábiga. Su capital y ciudad más poblada es Saná. La República de Yemen se sitúa en una zona geográfica y de navegación estratégica donde se transporta el 40 % de todo el petróleo que consume el mundo europeo. Es, igualmente, una zona donde opera la V Flota estadounidense del golfo Pérsico con base en Bahréin y los sectores bajo su vigilancia y acción. La actual República de Yemen surgió en 1990 tras la unificación de la República Árabe de Yemen (Yemen del Norte) y la República Popular Democrática de Yemen (Yemen del Sur).

Yemen ha estado en crisis política desde 2011, comenzando con las protestas callejeras contra la pobreza, el desempleo, la corrupción y el plan del presidente Saleh de enmendar la Constitución y eliminar el límite del mandato presidencial, convirtiéndolo de hecho en presidente de por vida.

Saleh renunció y los poderes de la presidencia fueron transferidos al vicepresidente Abd Rabbuh Mansur al-Hadi, quien fue elegido oficialmente jefe de Estado el 21 de febrero de 2012 en una elección de una sola persona.

Las manifestaciones pacíficas continuaron y fueron reprimidas violentamente por el gobierno.

A pesar de la promesa de una transición de poder ordenada y progresiva, para finales de marzo del 2012, muchos grupos aún continuaban con las protestas en ese país. La situación empeoró a lo largo de 2012, hasta que se logró la destitución del presidente.

La rebelión yemení debilitó al país y permitió la entrada de Al-Qaeda. Actualmente el Ejército combate intensamente en el sur de Yemen para liberar varias ciudades que están bajo su control.

Guerra de Yemen. El 25 de marzo de 2015, una coalición internacional dirigida por Arabia Saudí lanzó ataques aéreos contra el grupo armado de los hutíes en Yemen, desencadenando un auténtico conflicto armado.

Desde marzo de ese año a la fecha, se cuenta la muerte de 13.000 personas, de las cuales al menos 3.000 son niños menores de 14 años, además de 50.000 heridos. Dentro de estas cifras hay que considerar al menos 2.000 muertos y 600.000 posibles casos producto de la epidemia de cólera que azota a este país desde octubre del año pasado, que además ha significado el desplazamiento de cuatro millones de personas, la devastación de parte importante de la infraestructura sanitaria, industrial, vial, la destrucción de miles de viviendas y una situación de crisis humanitaria que ha alertado a la Organización de las Naciones Unidas, que advierte que el bloqueo aéreo, naval y terrestre que sufre esta nación árabe pone en peligro la vida de sus 27 millones de habitantes a través de la hambruna y las enfermedades que la azotan.

Efectivamente, la ONU exigió el pasado 13 de noviembre el levantamiento total de los bloqueos impuestos a Yemen, que han agravado la crisis humanitaria en el país más pobre del mundo árabe. Se habla de reabrir el puerto de Al-Hudaida, por donde solía ingresar el 80 % de los suministros alimentarios. La malnutrición severa en Yemen ha llegado a niveles alarmantes: el 80 % de los 22 millones de yemenitas dependen de la ayuda humanitaria. Pueden morir por causa de malnutrición aguda 400.000 infantes.

Con esto, ¿podemos creer que existe el Derecho Internacional? ¿Tienen algún valor las resoluciones de la ONU? ¿Qué tenemos que crear para alguna vez vivir en paz?