Lanzamiento. El plan SIA fue lanzado el 7 de septiembre dentro de la campaña ‘Misión educación cero drogas’.

Un clic contra el microtrafico

En dos semanas, 120 ciudadanos han colaborado -indirectamente- en la investigación de casos relacionados con la comercialización y venta de drogas al menudeo, en Guayaquil.

En dos semanas, 120 ciudadanos han colaborado -indirectamente- en la investigación de casos relacionados con la comercialización y venta de drogas al menudeo, en Guayaquil.

¿Cómo?, ingresando información sobre personas inmersas en microtráfico cerca de instituciones educativas, a través del Sistema de Información Antidrogas, socializado el pasado 7 de septiembre, por el Ministerio del Interior.

Un plan piloto que se puso en marcha en el Puerto Principal, lo que contribuye a las unidades especiales y de inteligencia policial a obtener mayor información sobre casos de microtráfico existentes en la ciudad y en los alrededores de las unidades educativas.

¿Cómo funciona? El sistema consta de dos opciones para la recopilación de datos. El primero es un formulario de colecta que será de uso exclusivo de la policía. En él, los agentes registrarán la información proporcionada por la ciudadanía como el lugar del expendio, los sospechosos, el modo de operación y los inmuebles o vehículos utilizados para el ilícito.

La segunda opción es la relacionada con las escuelas y colegios. Personal capacitado de los departamentos de consejería estudiantil, dirigentes de padres de familia y presidentes de los alumnos pueden ingresar información sobre vendedores, guardias, conserjes e incluso alumnos sospechosos y áreas de riesgo.

“Se recaba la información de las denuncias, se las filtra y se dispone a la unidad respectiva la investigación de inteligencia pertinente. Es una forma mucho más amigable, menos invasiva y menos riesgosa en la que los padres de familia pueden informar sobre un sitio en el que se esté expendiendo drogas y que constituya un riesgo para la seguridad pública”, detalló el general Édisson Barrera, comandante de la Zona 8.

El programa está diseñado para poder comparar información con bases de datos de otras entidades que también participan en la lucha antidrogas, como el Ministerio de Educación.

Si bien, las cifras demuestran la acogida que tiene el plan, especialmente en zonas marginales, hay padres de familia que muestran su temor a colaborar con ese tipo de información.

Durante el lanzamiento del plan, ‘Gisella’ manifestó su miedo a las represalias en caso de que la persona a quien denuncie sepa que fue ella.

“Conozco a un jovencito por mi barrio que se fuga (por consumir drogas), dice que uno puede denunciar, pero si el estudiante viene con una pistola o me tira piedras a mi casa por andar metiéndome en su vida”, preguntaba la mujer.

A su lado, ‘Jhon’ recordaba que hace unos meses denunciaron a un muchacho por sus presuntos vínculos con drogas. “Llegó al colegio y amenazó a la rectora y le gritó que él tenía derechos”.

‘Katty’, una colegiala de 14 años, considera que los planes emprendidos los ayudan a ir “por un camino sin drogas ni adicción”. Algo con lo que concuerda ‘Evaristo’, de 18 años. Cuenta que vive por una zona ‘H’, donde ha visto a muchos amigos perderse por esa sustancia. Asegura que él prefiere primero avisarle a los padres de ellos antes que denunciarlo ante las autoridades.