
La clave para cuidar su moto
Una moto siempre es algo especial, así como quien es amante de este tipo de vehículos. Solo quien tenga o haya tenido una máquina de dos ruedas puede comprender ese vínculo que se genera entre la moto y el usuario.
Una moto siempre es algo especial, así como quien es amante de este tipo de vehículos. Solo quien tenga o haya tenido una máquina de dos ruedas puede comprender ese vínculo que se genera entre la moto y el usuario.
Mantenerla en plenitud de condiciones es responsabilidad del dueño, quien deberá tener especial cuidado al momento de realizar el cambio de aceite, parte fundamental en lo que a mantenimiento se refiere.
Salomón Fuentes, representante técnico de Shell para la zona de Guayas y del austro ecuatoriano, recomienda efectuar el cambio cada tres meses o 5.000 kilómetros, según sea el caso. “Siempre será necesario ir evaluando aspectos técnicos del funcionamiento del lubricante cuando está en uso. Este debe ir acompañado de un buen combustible”, explica.
A diferencia de los automóviles, en las motos es necesario lubricar de manera integral el motor, la caja y el sistema de embrague, por lo que la elección del aceite es primordial. No es recomendable utilizar marcas desconocidas porque no garantizan el cuidado efectivos de todas las piezas.
“El primer punto a considerar al momento de elegir un lubricante es tener en cuenta qué condición tiene la moto (si es nueva, usada o reparada) y cuál es el uso específico que se le va a dar. No es lo mismo un usuario que pasea los fines de semana que quien tiene la moto como una herramienta de trabajo y hace muchos kilómetros todos los días”, acota el mecánico César Falconí.
Un buen aceite debe tener un alto poder de control de la oxidación, porque las motos trabajan a altas revoluciones y por ende, con alta temperatura.
“El lubricante tiende a oxidarse y a incrementar su viscosidad. Cuando tiene un motor con una viscosidad por encima del rango de operación, deja de estar lubricado y no está protegido. El aceite debe estar equilibrado, con un paquete de aditivos que beneficie el poder antioxidante, antidesgaste, en el caso de la moto que haya el corte o cizallamiento para que la película lubricante que se forma no se rompa”, dice Fuentes.
La complejidad de un motor de motos es elevada. Se requieren llaves especiales y cuidados con la limpieza de partes y de la tornillería. Lo mismo ocurre con las juntas. Asegurarse que las herramientas de trabajo sean las indicadas es parte fundamental en el cambio de aceite.