Cinco heridos en un acto del Ku Klux Klan en California

La cifra de personas lesionadas durante un enfrentamiento el sábado entre miembros del grupo racista Ku Klux Klan (KKK) que realizaban una marcha en Anaheim (California, EE. UU.) y personas que intentaban evitar dicha manifestación se elevó ayer a cinco y la de detenidos a trece, informo la Policía.

El portavoz Daron Wyatt explicó que el grupo supremacista blanco había planeado una marcha autorizada en un parque de Anaheim, donde los esperaba un grupo más numeroso de manifestantes, que los atacó a su llegada.

En la trifulca participaron unos treinta contramanifestantes y media docena de seguidores del KKK, que no llevaban las túnicas y capuchas blancas que los caracterizan.

Las peleas se saldaron con cinco manifestantes heridos, uno de ellos apuñalado y otro herido con el remate metálico del asta de una bandera, el cual fue hospitalizado en estado muy grave.

Como resultado de las peleas también fueron detenidos siete contramanifestantes, así como seis seguidores de la organización racista. El sábado se había informado de cuatro heridos y un número indeterminado de detenidos.

En este tipo de manifestaciones, los supremacistas del KKK suelen repartir panfletos y portar estandartes y banderas de su agrupación.

“Aunque la gran mayoría de nuestra comunidad no está de acuerdo con un grupo en particular que visita nuestra ciudad, no podemos impedir una reunión legal para expresar sus opiniones”, aseguró el jefe de la Policía local, Raúl Quezada, en una declaración.

El KKK tiene arraigo en el sur de California y llegó a ser la fuerza política predominante en los años 20. Hoy sus apariciones son raras. EFE