
La cedula de Assange, escaparate de Espinosa
La ahora titular de la Asamblea de la ONU vuelve a las críticas. Se reanuda su juicio político.
Las críticas a la actuación de la exministra de Relaciones Exteriores, María Fernanda Espinosa, se reavivan en el país, dejando expuesta a la exfuncionaria que ahora ostenta un cargo de trascendencia internacional, luego de la denuncia del canciller José Valencia, sobre las “inconsistencias” encontradas en la naturalización del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, otorgada en enero de 2018. Desde la Asamblea también se exige que se tramite el juicio político de la exfuncionaria.
Espinosa, quien dejó la Cancillería en junio del año anterior, al momento, es la presidenta de la Asamblea general de las Naciones Unidas para el periodo 73. Para internacionalistas consultados por EXPRESO, las denuncias hechas por Valencia sobre las irregularidades en la naturalización de Assange pone en entredicho la imagen de Espinosa, aunque no ven cómo el Gobierno de Lenín Moreno puede evitar resultar salpicado por todo esto, ya que fue su ministra y obtuvo su respaldo para llegar a su nuevo cargo.
Para el experto Lautaro Ojeda, lo denunciado por Valencia confirma la “maniobra” que ella hizo con el fin de lograr su posición, sin olvidar que en pleno conflicto de la frontera norte, Espinosa estuvo negociando los votos, “demostrando que lo que más le importaba era la Presidencia. “Queda bastante claro la imagen negativa de la presidenta de la Asamblea de Naciones Unidas”, sostuvo el catedrático. “María Fernanda Espinosa queda mal ubicada, queda con un mal precedente, y creo que ese era un tema que hizo al presidente Lenín Moreno demorar la decisión sobre Assange”, señalo el experto Sebastián Mantilla.
Los dos creen que la Asamblea Nacional debe jugar un “papel fundamental” en esta situación, llevando una investigación profunda que no quede solo en el tema de Contraloría, que es un tema solicitado por el propio Gobierno del cual fue parte la excanciller.
En tanto, en la Legislatura la carrera es contra el tiempo. En junio próximo se cumple el año que tiene el Parlamento para interpelar a María Fernanda Espinosa. El pedido de juicio político se hizo en mayo del 2018. Sin embrago, pasó varios meses en el escritorio de la presidenta de la Asamblea, Elizabeth Cabezas, antes de que el Consejo de Administración Legislativa (CAL) lo aceptara a trámite. Hasta el momento no ha sido remitido a la Comisión de Fiscalización para que inicie el proceso de sustanciación.
Los asambleístas Cristina Reyes (PSC) y Fernando Flores (CREO), que son parte del grupo de legisladores que impulsan la interpelación, aprovecharon la comparecencia del canciller José Valencia, para solicitar a Cabezas que remita el expediente a Fiscalización. “Ahora es más que necesario que Espinosa responda ante la Asamblea por lo que hizo en su beneficio y dejó de hacer por el país”, dijo Flores.
La polémica
El apoyo del gobierno
“Felicitaciones María Fernanda Espinosa. Un honor y un orgullo para el Ecuador. La primera mujer ecuatoriana y de la región, en ocupar la Presidencia de la Asamblea General de la ONU con 128 votos a favor”, dijo Lenín Moreno, pese a las críticas por la nacionalización de Assange.
Juicio político y fiscalía
“Para María Fernanda Espinosa, además del juicio político en esta Asamblea -por eso, presidenta Cabezas remita cuanto antes la decisión del CAL a Fiscalización-, la Fiscalía debe iniciar, de oficio, las investigaciones en contra”, recordó la asambleísta Cristina Reyes, del PSC.