Compras. Ford, reconocida por su alta gama, logró vender hasta noviembre 837 carros, un 85 % más que en el mismo periodo del año pasado.

Los carros salen del bache y se apuntan mejores ventas

El sector facturó 92.668 unidades hasta noviembre, un 62,9 % más que el año pasado. La eliminación de cupos y mejores precios incentivan la demanda.

Para quienes se proponen comprar un carro, las condiciones del mercado dicen que este es un buen momento para hacerlo. Tras la eliminación de los cupos a la importación, las concesionarias de vehículos no solo que lucen una oferta más variada de modelos, sino también mejores precios. Una situación que este año ha activado la demanda y que ha hecho que el sector automotor, de enero a noviembre, venda 92.668 unidades, un 62,9 % más que en igual periodo del año pasado.

La cifra no solo convierte al 2017 en un buen año, sino que ha permitido al sector ‘salir del bache’ de malas ventas en el que había caído desde el 2015. Ese año el Gobierno restringió (en cupos y dólares) el ingreso al país de carros importados y las partes y piezas que las industrias requieren para ensamblar vehículos. Ahora, tras la eliminación de esta medida y una mejora en la demanda, la venta de carros nacionales creció un 43,8 %; los importados, un 77,8 %.

Manuel Murtinho, gerente general de la Asociación Ecuatoriana Automotriz (AEA), menciona que la liberalización del comercio ha permitido que muchas concesionarias empiecen a traer toda gama de vehículos y no solo los carros que les generaban mayor rentabilidad. “Por eso hoy en día se ve una gran cantidad de modelos que antes no se los traía por la restricción, incluyendo los modelos más baratos”.

Wilson Galarza, gerente de Autolasa, menciona que la compra en el exterior, en un mayor volumen, ha hecho posible que las concesionarias puedan también negociar mejores precios e introducir unidades más baratas, a costos que están entre un 2 y 6 % menos.

No obstante, según un sondeo realizado por este Diario, la baja en algunos modelos puede llegar a ser mayor en el mercado. Carros como el Hyundai Creta que antes valía $ 29.000, hoy está en $ 25.990. Igual ocurre con ciertos modelos de Chevrolet, la marca más vendida del país: Un Chevrolet Cruze que costaba $ 34.250, ahora está en $ 29.990; el Spark GT que antes estaba en $ 18.450, hoy se lo puede obtener en $ 15.460.

Pero la eliminación de los cupos al producto importado no es el único factor que está dinamizando la oferta y los precios. También empieza a generar su efecto el acuerdo alcanzado con la Unión Europea, que desde este año hace posible que el arancel del vehículo importado baje un 5 %.

Así lo explica Juan Martín Muller, jefe de Comunicación y Responsabilidad Corporativa de Maresa, la concesionaria que incluye en su oferta también marcas europeas.

El beneficio que brinda el acuerdo, junto a la eliminación de cupos, hizo que ciertos modelos de carros que están dentro de su oferta bajaran de precio. “En nuestro caso, el auto Fiat 500, este año lo hemos traído desde Polonia a un precio de $ 24.990, cuando ese mismo vehículo años atrás lo importábamos a casi $ 36.000”.

Son mejores condiciones que reaniman también a tomar decisiones. Martín Muller sostiene que este escenario ha servido como incentivo para que Maresa este año se decida a invertir en la adquisición de nuevos modelos. “En nuestro caso hemos podido relanzar marcas. Este año trajimos una nueva camioneta: la Fiat Fullback. Solamente en Mazda lanzamos 5 nuevos modelos”.

Es una oferta nutrida que también está generando una suerte de competencia en el mismo mercado y que ha llevado a las concesionarias como Chevrolet a aplicar facilidades de pago, descuentos y bonos (que van de $ 500 a $ 4.000, según el tipo de vehículo) para hacer más atractiva la oferta.

La pelea es fuerte, pues luego de tres años de ver desplomar sus ventas, las empresas del sector buscan una real recuperación. Galarza admite que este año trae oportunidades, pero aclara que en nada las cifras actuales logran cubrir las pérdidas que esta política de restricción originó. “Venimos de una recesión del sector y encima de tener que enfrentar un pago exagerado del anticipo del Impuesto a la Renta. Algunas firmas llegaron a pagar el 98 % de ese impuesto, aún en esa situación”.

La expectativa es que en los próximos meses la demanda de vehículos siga el buen ritmo. El anuncio de nuevas restricciones a la importación, como el pago de la tasa aduanera, los inquieta, pero no merma las esperanzas de mejora en este mercado que cada vez es más competitivo y atractivo para nuevos participantes como los carros chinos.