Batukka y una noche para recordar
La banda guayaquileña, Batukka, ofreció un concierto en la sala Experimental del Teatro Centro de Arte con clásicos del pop.
Batukka es conocida por ser una de las agrupaciones que más rinden homenajes en Guayaquil a leyendas de la música, principalmente del rock. Sin embargo, a la hora de adentrarse en el pop, también sale airosa. La calidad vocal y musical de sus integrantes así lo demostraron en el concierto Billboard 80’s, efectuado la noche del viernes en la sala Experimental del Teatro Centro de Arte. El público colmó por completo el lugar haciendo vibrar a quienes crecieron con la música de Simple Minds, Cindy Lauper, Laura Branigan y U2.
El show abrió con una presentación de Batukka Kids (conformado por los hijos de algunos de los integrantes de Batukka) y dio paso a la banda integrada por los hermanos Bilo y Andrés Albán, y las actuaciones especiales de Pete Castillo, Rochi Vernaza, Juan Vallejo y Andrea Castillo.
Los mejores momentos de la noche se dieron con las interpretaciones de Pete acoplando su voz a la de Billy Idol con Dancing With Myself, Bono (With Or Without You), Morten Harket, de A-Ha (Take On Me); y Andy Bell, de Erasure (Stop).
Rochi Vernaza deleitó con las melodías Love Shack (B52) y Nowhere Fast (Fire Inc.) Andrea Castillo no se quedó atrás recordando a Madonna con su Like a Virgin y a Laura Branigan con el clásico Gloria. Juntar las tres voces (Pete, Andrea y Rochi) en un escenario fue una estupenda idea.
Pero no todo fue un tributo totalmente ochentero. Hubo espacio para la década del 70 con dos hits de Donna Summer (Hot Stuff y Bad Girls). Lo mismo sucedió con dos temazos de los 90, Break It Down Again (Tear for Fears) y Suicide Blonde (INXS). Casi al final del show la voz de Pete Castillo pareció perder algo de fuerza y decayó un poco con Bizarre Love Triangle, de New Order, cuya adaptación musical no fue la mejor de la noche, pero en general fue un excelente show para aplaudir de pie. La agrupación cerró con A Little Respect, el megahit que consolidó al dúo inglés Erasure en 1988. Fue emocionante ver y sentir al público conectado de principio a fin, algo que no siempre sucede pero con Batukka es otra cosa y sus seguidores lo saben.
